Foto: EFE/BIEL ALIÑOVALÈNCIA. Benigànim, un municipio de la Vall d’Albaida que no llega a los 6.000 habitantes, ha estrenado la nueva competencia de la Conselleria de Sanitat para decretar el confinamiento localizado de algunas zonas. Con casi 100 positivos confirmados, esta localidad ha disparado en tan solo una semana sus niveles de incidencia acumulada: mientras que hace siete días esta tasa se ubicaba en 34,24 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes, ahora alcanza los 994,46. Un crecimiento exponencial que, finalmente, ha derivado en la imposibilidad de rastrear contactos y en una cuarentena de 14 días.
Todo comenzó hace un par de semanas, cuando Benigànim detectó un primer brote con 24 casos de origen social y laboral. La propia alcaldesa, Amparo Canals, se vio afectada por esta circunstancia y tuvo que guardar cuarentena junto con otros trabajadores del consistorio, aunque finalmente ha dado negativo. El lunes pasado, ante la sospecha de que la situación podría ser todavía peor, se citó a 196 vecinos en el polideportivo municipal para practicarles pruebas PCR masivas. "Tal y como les sacaban las muestras, les decían que en 24 o 48 horas tendrían los resultados", explica el portavoz del Partido Popular, Miguel Boluda. “Sin embargo, empezaron a pasar los días y nadie les comunicaba nada”.
"Haciendo averiguaciones nos enteramos de que la máquina de analizar PCR en el Hospital de Xàtiva está rota, y que solo puede trabajar a nivel manual dando un resultado cada media hora. Entonces, únicamente está operativa para el uso interno del centro y no puede asumir las pruebas que vienen de fuera", continúa Boluda. Según explica, este hecho fue finalmente confirmado por el Ayuntamiento y la Conselleria de Sanitat en una reunión que mantuvieron el domingo por la tarde: "Nos han dicho que es una máquina que viene de Alemania, que es imposible arreglarla y que no saben cuándo van a tener una nueva", concluye al respecto.
Esta avería en el Hospital de Xàtiva supone un serio problema para el departamento de salud Xàtiva-Ontinyent, que se queda sin centro de referencia en el que analizar las pruebas extraídas de los municipios de la zona. Por el momento, y como medida provisional, parece que se están derivando al Hospital General de València: "Entendemos que es la saturación del Hospital General lo que ha llevado al retraso de más de cinco días para comunicar los resultados", declara el portavoz de los populares. "Hay que tener en cuenta que nosotros enviamos casi 200 test el lunes y otros tantos a lo largo de la semana. También sabemos que llegaron varios de Ontinyent, más todos los que tengan del entorno de la capital".
Finalmente, las 196 pruebas masivas del lunes en Benigànim dieron lugar a 50 positivos, a los que hay que añadir otros 24 de días posteriores. En total, alrededor de 100 vecinos infectados: "En general, la gente ha sido responsable y ha esperado en su casa. Pero siempre hay unos cuantos que no son tan responsables, que los ves comprando o yendo a trabajar. Se habrían reducido muchos riesgos si se hubieran conocido los resultados en el tiempo estimado, que no puede superar las 48 horas", apuntilla Boluda. "Las pruebas se hicieron el lunes, y los positivos no se empezaron a comunicar hasta el sábado. Nos consta que algunos de los afectados recibieron la notificación ya en la madrugada del domingo", concluye.
El confinamiento de Benigànim entró el vigor el lunes por la tarde, después de que la Conselleria de Sanitat trasladase la decisión al Ayuntamiento. Por el momento, los vecinos tendrán que permanecer en sus casas durante 14 días, a excepción de supuestos como ir a trabajar, volver a su lugar habitual de residencia, cuidar a personas mayores o dependientes y, en definitiva, causas de fuerza mayor. Por supuesto, las instalaciones municipales permanecerán cerradas y la vuelta al cole no podrá producirse en los días previstos. Si a pesar de todo esto el coronavirus no remite, la Generalitat podría tomar la decisión de ampliar la cuarentena otras dos semanas más.
La resolución ha sido trasladada a la Abogacía de la Generalitat para que la ratifique, y también a la Delegación de Gobierno y los ayuntamientos colindantes para que colaboren con sus cuerpos y fuerzas de seguridad. En este sentido, la alcaldesa de la localidad, Amparo Canals, ha explicado que ya se ha reunido con los órganos competentes para coordinar los dispositivos policiales: "Se van a desplazar más agentes de la Guardia Civil, Policía Autonómica y Local. Todos nos van a ayudar a hacer esto más llevadero: colocar la señalización, cortar las carreteras…".
Sin embargo, en lo que tiene que ver con sanciones, reconoce que tan solo las contempla como última opción: "Yo quiero pensar que los vecinos van a ser responsables y se van a quedar en casa. La verdad, no quiero hablar de penalizaciones porque tengo fe en que se van a hacer las cosas bien", recalca. "Si cumplimos con nuestro deber, esto acabará en tan solo 14 días. Tenemos que solucionarlo y afrontarlo ahora".
Asimismo, la alcaldesa se niega a apuntar responsabilidades concretas sobre los vecinos: "Esto ha sucedido aquí como hubiera podido suceder en cualquier otro sitio. No hemos hecho nada especial ni fuera de la norma que se no haya visto también en otros municipios. Simplemente el bicho se ha cebado más con nosotros y punto. No es culpa de nadie, pero sí responsabilidad de todos acabar con él". En cuanto a hospitalizados, por el momento el municipio no ha registrado ni un solo caso. Según ha sabido el consistorio, la cepa es considerablemente débil y no provoca más que síntomas leves, perfectamente compatibles con la estancia en el domicilio.
