CASTELLÓ. Pesfasa comienza su nuevo rumbo bajo la nueva gestión. El pasado 3 de junio la multinacional peruana Océano Seafood tomó el control de la histórica compañía del Grau de Castelló tras firmar la compra de Pescados Fabregat por 1,8 millones de euros.
Todavía inmersos en pleno proceso de adaptación, los nuevos gestores ya han trasladado a la plantilla la voluntad de actuar con transparencia y se han comprometido a atender algunas de las solicitudes de los empleados de Pesfasa. Entre ellas, la mejora en las categorías profesionales y la consiguiente actualización de salarios. Una predisposición que ha sido bien recibida por los trabajadores pero que esperan que se materialice "en hechos y no solo en palabras" en los próximos meses.
Según ha podido saber Castellón Plaza, para el período de adaptación se ha trasladado a Castelló un equipo de Océano compuesto por unas cinco personas entre las que se incluye el CEO de la multinacional, Michael McGregor. Sin embargo, el encargado de administrar Pesfasa será Sergio Piaggio. De hecho, es el propio Piaggio el que figura como Administrador Único de Rough Riders Beach SL la sociedad a través de la cual Océano gestionará la marca Pesfasa. Este mismo lunes el Boletín Oficial del Registro Mercantil publicaba la disolución de Pescados Fabregat SA, y el cese de la misma de los hermanos Fabregat Beltrán, poniendo fin así a una empresa familiar casi centenaria.
Entre los objetivos que se marca la nueva dirección, se encuentra reforzar su presencia en norteamérica y convertirse en líderes de exportación de pulpo a los Estados Unidos. Aunque este sería un objetivo a medio plazo, Océano no descarta ampliar la plantilla de Pesfasa para lograrlo. Por el momento, los nuevos gestores ya han realizado los primeros pedidos de género para que Pesfasa retome la actividad normal.
Tal y como incluía el acuerdo de compraventa, Océano ha mantenido todos los puestos de trabajo, sin embargo según ha podido saber este diario, ninguno de los antiguos administradores sigue vinculado a la empresa al haber alcanzado un acuerdo de salida con los actuales dueños de la compañía.
Tras 90 años de historia, con la entrada de Océano la hasta ahora compañía familiar radicada en el Camí Vell de la Mar nº182 del Grau de Castelló, pasa a integrarse en una multinacional que cuenta con más de 1.100 trabajadores y con muelles propios, cinco plantas de procesamiento y terminales internacionales de contenedores en Perú desde donde exportan a más de 20 países en todo el mundo. Comercializan especies peruanas como el calamar gigante, huevas de pez volador y mahi mahi pero también procesan especies foráneas, como el camarón argentino o el calamar Loligo.
A través de su marca Océano Seafood venden conservas de pulpo, atún, bonito, langostinos o anchoveta. El negocio de la compañía se divide en seis unidades: el consumo masivo con la marca A1; el comercio de especies pelágicas, a través de Bluefish Pacific; la logística de exportación naviera con Port Logistics; la gestión de sus cinco muellesen Perú; la comercialización de pesca, a través de Océano Fishing Services y las cinco plantas de procesamiento industrial de congelados. Aunque su principal mercado se encuentra en Asia, dónde exportan más del 75%, seguido de Europa que es destino del 17% de su producción, parece ser que el objetivo de Océano con la adquisición de Pesfasa es aumentar la cuota de exportación a Norteamérica que actualmente es del 7%.