Junto a ellas estaban entre los dirigentes de la dirección estatal como la secretaria de Organización, Lilith Verstrynge, y el coportavoz, Javier Sánchez Serna, durante un acto donde las bases de Podemos han ovacionado a Montero y donde en varias ocasiones ha sonado la canción 'No estaba muerto, andaba de parranda' versionada por Peret.
De esta forma, se confirma una opción que venía ganando enteros en el seno de la formación desde el choque con Sumar y la posterior fractura con el proyecto de Díaz, al optar por uno de sus perfiles más destacados para acometer emprender de nuevo su andadura en solitario, tras atravesar un momento complicado tras diversas dimisiones en el seno de la formación.
Y supone también un movimiento simbólico con el objetivo de relanzar el proyecto político de Podemos, mermado tras el último ciclo electoral, con la apuesta por las europeas que ya fueron un hito de la irrupción política de los morados hace casi una década, cuando logró en 2014 cinco diputados encabezados por su exlíder Pablo Iglesias.
Con ello, Podemos tras recuperar su autonomía política ante Sumar busca su relanzamiento en unos comicios donde tradicionalmente es más sencillo obtener representación parlamentaria, dado que en función con la participación se puede conseguir escaño con un 2% de los votos. Por tanto, sectores del partido destacan que el anuncio a seis meses de los comicios pretende otorgar claridad de cara al futuro a sus bases y organizar las primarias con suficiente tiempo.
Renovación de direcciones autonómicas
Además, la secretaria general del partido morado ha anunciado consciente de la importancia de la implantación territorial de Podemos, uno de los campos donde el partido ha mostrado debilidad, que en breve se abrirá el proceso para renovar las direcciones autonómicas que están pendientes, tras dimisiones.
Actualmente la formación tiene gestoras, tras los malos resultados de los comicios regionales del 28M, gestoras en comunidades como Comunidad Valenciana, Madrid, Asturias, Aragón y Baleares, tras las renuncias de los respectivos coordinadores autonómicos y sus ejecutivas.
Con un mensaje de esperanza, Belarra ha arengado a sus correligionarios que "lo mejor está por venir" y que, en vísperas del décimo aniversario de la formación, reivindica el esfuerzo "titánico" de Podemos para romper con el bipartidismo y conformar un bloque democrático que gobierna el país desde hace cuatro años.
Montero pide una izquierda "fuerte": "No queremos migajas"
Mientras, Montero se ha mostrado dispuesta a encabezar una candidatura, consciente de que hay que cuidar este proyecto, que "no deje impune" el "genocidio" de Israel contra el pueblo palestino, defender a los pueblos oprimidos como los saharauis y abogar por la regularización de migrantes irregulares frente a una "Europa fortaleza" que no rechazan los verdes y la socialdemocracia, dado que ninguna "valla ni porra" va a frenar la crisis migratoria.
"Nos merecemos más, no tenemos que aceptar el retroceso de derechos de PP y Vox, ni el 'no se puede' del PSOE", ha subrayado la exministra de Igualdad para prometer que Podemos nació para "cambiar las reglas del juego" y construir relaciones con el bloque progresista, pero haciéndose "respetar".
Asimismo, ha advertido que en España una movilización progresista sin precedentes logró frenar a las derechas en las elecciones del 23J, pero se ha preguntado si se ha conseguido frenarles de verdad dado que gobiernan la mayoría de comunidades y tienen amplio poder en la esfera económica y judicial.
En consecuencia, ha presumido de estar en un partido que aboga por una izquierda y feminismo "fuerte", que "no acepta callar su voz" ante las peticiones de silencio del PSOE que aboga por transformar el país despacio.
También ha señalado que Europa se juega mucho en estas elecciones dado que el pacto antifascista que se forjó en el continente tras la II Guerra Mundial puede "quedar enterrado" por al "extrema derecha" y la "hipocresía" e "inacción" de la socialdemocracia.
Patrimonio político de Podemos
Mientras, Belarra ha presumido que Podemos ha levantado un "patrimonio democrático" con las medidas más destacadas en la anterior legislatura, cuando gobernaron con el PSOE; y con una forma de hacer política consistente en decir "todas las verdades que nadie se atrevía a decir", como que enviar armas a Ucrania solo sirve para la escalada bélica y denunciar que Israel está perpetrando un genocidio en Gaza.
Por tanto, la líder de Podemos ha insistido en que su partido debe seguir siendo útil a la ciudadanía en la próxima década, pese a denunciar los "durísimos ataques políticos, mediáticos y judiciales" para desprestigiarles.
Así, ha afirmado que empiezan un "nuevo camino" para reforzar un proyecto político de izquierda "frente al poder" y que potencie el feminismo aunque "moleste a los amigos" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
En consecuencia, ha reivindicado que la izquierda necesita "claridad ideológica, ética y moral", porque no se puede permitir que "vuelva la cobardía" a la política, sino que lo necesario es "valentía" para frenar a la ultraderecha. Por tanto, ha marcado las próximas elecciones europeas son esenciales y por eso postula a Montero como candidata, dado que Podemos no se va a referenciar con los "verdes" o los socialdemocracia.