La secretaria general del partido morado, Ione Belarra, ha ofrecido este dato a través de un mensaje en las redes sociales, donde ha ensalzado la implicación de sus afiliados e inscritos para seguir "construyendo un proyecto político valiente que no le deba nada a ningún poderoso".
Ayer, la formación lanzó un vídeo para solicitar la colaboración económica de sus bases de cara a aportar donaciones no finalistas para la organización, con la idea de fortalecer el proyecto político.
En la sección de participación en la página web de Podemos se incluye un formulario donde se informa que para ello es necesario ser mayor de edad, identificarse con el DNI y que el límite fijado para las donaciones es de 50.000 euros anuales, según el artículo quinto de la Ley de financiación de partidos políticos.
Campaña lanzada en vísperas de su conferencia política
Esta campaña llega en vísperas de la recta final del proceso abierto por la formación para redefinir su hoja de ruta, que culminará con una votación de su nuevo documento político el jueves y viernes, así como una conferencia el sábado donde se expondrán las principales conclusiones del texto y que tendrá lugar en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
Durante estas semanas la cúpula del partido ha desplegado encuentros con la militancia por distintos territorios del país para dialogar con los integrantes de sus círculos -- la estructura de base de Podemos-- y recabar sus opiniones y aportaciones sorbe el proceso de rearme interno.
Una cita que llega tras una sucesión de desencuentros con Sumar y tensión con el proyecto liderado por la vicepresidenta, Yolanda Díaz, desde que suscribieron un acuerdo de coalición para las pasadas elecciones generales.
En el documento inicial que elaboró la dirección de Podemos condicionada los acuerdos de unidad electoral (los próximos comicios son los europeos) al respeto de su autonomía política, así como a la exigencia de primarias para definir las candidaturas y que no se impusieran vetos a nadie de su organización, como recriminan a Sumar en el caso de Montero que se quedó fuera de las listas electorales.
También recuerda que la doble militancia en el partido no está permitida y que no podrá compartirse espacio con otras organizaciones como Sumar, que en sus estatutos no excluye la doble afiliación.
Además, el partido desplegará una consulta a sus bases aún sin fecha definida para preguntar si apoya la investidura del presidente en funciones, Pedro Sánchez, pero no preguntará sobre el pacto de coalición entre PSOE y Sumar, del que se han desmarcado.
No obstante, diferentes cargos han remarcado que los cinco diputados del partido en el Congreso actuarán con responsabilidad para la investidura y su exlíder Pablo Iglesias aseguró que votarán a favor y su apoyo no estaba en entredicho.
Momento complicado tras las elecciones del 28M
Podemos atraviesa un momento complicado tras el varapalo electoral que sufrió en las elecciones autonómicas del 28M, que les hizo ser fuerza extraparlamentaria en Madrid, Comunidad Valenciana y Canarias, además de experimentar fuerte descenso de representación en Asturias, Baleares y Aragón.
De esta forma y tras financiar esa campaña mediante microcrétidos, como es tradición desde sus inicios, el partido tendrá una merma de ingresos tras quedarse fuera de varios parlamentos autonómicos y ver reducida su representación drásticamente en las cámaras autonómicas de Aragón, Asturias o Baleares.
A su vez, desplegó un ERE que afectaba al 70% de su plantilla y en varias comunidades desplegó gestoras tras las dimisiones de sus direcciones autonómicas, como en el caso de Aragón, Comunidad Valenciana o Asturias. Eso sí y en virtud de ese pacto de coalición, al partido morado le corresponden el 23% de las subvenciones que reciba Sumar.
Recientemente se levantó una polémica a raíz de unas declaraciones de la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau, que instó a la formación morada a cumplir el acuerdo de coalición entre Sumar y PSOE, del que han marcado distancias, y recalcó que en caso contrario no obtendría el retorno de los recursos económicos pactados.
Unas palabras a las que respondió con dureza Iglesias al acusar a la líder de los 'comunes' de "frustración autoritaria" y de faltar el respeto a la autonomía política de Podemos.