CASTELLÓ. Porcelanosa consiguió contener la crisis energética que durante 2022 afectó especialmente al sector cerámico a raíz de la invasión rusa de Ucrania. La firma de Vila-real, uno de los grupos azulejeros más importantes del clúster castellonense, notó el incremento de los costes tanto de las materias primas como de la energía, fundamental en el proceso de producción. Un panorama que si bien le ha llevado a disparar su facturación por el alza del precio del producto, ha provocado una merma de sus beneficios anuales.
Así lo reflejan las cuentas anuales consolidadas de Porcelanosa referentes al ejercicio de 2022, según el cual el conglomerado empresarial llegó a superar los 900 millones de euros en facturación -902 millones, concretamente-, lo que supuso un incremento de las ventas de un 10,1% respecto a la cifra del año anterior, cuando ingresó casi 820 millones. Un repunte debido, con toda probabilidad, al aumento del precio de venta del producto que ha tenido que aplicar el sector para repercutir el exponencial incremento de costes.
Lo cierto, sin embargo, es que esto no se ha podido traducir en una mejora de los beneficios empresariales del grupo. Tal como han denunciado en numerosas ocasiones los representantes del sector, el encarecimiento del precio final no ha podido absorber por completo el alza del coste de la energía, la subida de los costes laborales y de las materias primas. Y en ese sentido, Porcelanosa no ha sido diferente -hace poco por ejemplo se conocían los resultados de Marazzi con la misma tendencia-.
Concretamente, el grupo vila-realense, a pesar de haber ingresado más, vio reducirse sus ganancias durante 2022 hasta los 44,4 millones de euros frente a los 47,3 millones que registró el año anterior. Una caída del 6,2% y de unos tres millones de euros en términos absolutos. Esta disonancia se traduce en la caída de los márgenes: en 2021, la firma obtuvo 5,7 euros de beneficio por cada 100 facturados, y ahora, esta relación cae a los 4,9 euros por cada 100.
"En el 2022 el sector cerámico ha estado marcado por el encarecimiento de los precios de los suministros de gas natural y electricidad, una disminución de la demanda en algunos mercados importantes debido al alza de precios y la situación inflacionista e incrementos en las tarifas de los fletes", explica en ese sentido la propia firma en el informe de gestión que acompaña al balance anual del año pasado.
Las sociedades industriales de Porcelanosa y toda su red comercial tienen un marcado carácter internacional. De los 902 millones de euros de ventas registrados en 2022, apenas 224 millones (el 24,8%) correspondieron a la facturación en el mercado nacional, por lo que los otros 678 millones de euros constituyeron la cifra de negocio en el extranjero, repartida entre los cinco continentes.
Y el año pasado, se acentuó esta circunstancia, teniendo en cuenta que la facturación nacional el año anterio había supuesto el 26,8%, dos puntos porcentuales más. También a nivel laboral los datos de la plantilla fueron buenos, según recoge el balance: "La plantilla media al cierre del ejercicio 2022 es de 4.796 personas, siendo en 2021 de 4.642 personas". En 2022, la compañía repartió 12 millones de euros en dividendos, la misma cifra que el año anterior.
Por otra parte, Porcelanosa no adquirió participaciones de otras empresas durante 2022. Hay que recordar que la multinacional liderada por las familias Soriano Manzanet y Colonques Moreno creó a mediados de noviembre del 2019 la sociedad Porcelanosa Corporación SL, con vistas a concentrar en ella a todas las empresas que componen el holding, donde consolida los resultados anuales.
En 2021, Porcelanosa abosrbió la empresa Venís, dedicada a la fabricación de azulejos, gres y porcelánico y segunda gran marca del holding empresarial. Ésta llegó con la presentación de Venis Projects como octava marca del grupo, orientada a la comercialización de producto y exclusivamente dirigida a profesionales. También se convirtió en la dueña del 100% del capital de su comercializadora en la provincia de Alicante, Alicer SA.
La firma azulejera trabaja desde hace un tiempo en la reestructuración de su entramado empresarial, especialmente a raíz de la pérdida de peso de uno de sus fundadores en el accionariado y los órganos de decisión. La sociedad holding Porcelanosa Corporación adquirió para autocartera un tercio de las acciones de Manuel Colonques, que mantiene alrededor de un 5% del capital. Asimismo, este cofundador, de 79 años de edad, salió de los consejos de dirección el pasado año.
Aunque la situación del sector no es la más halagüeña, lo cierto es que la compañía azulejera ha culminado inversiones como su última planta automatizada que cuenta con una superficie de 36.000 metros cuadrados en Vila-real, a la que ha dedicado 55 millones de euros. Ubicada en la sede central de la multinacional, el nuevo centro de producción está especializado en la fabricación de porcelánico y piedra sinterizada de gran formato que se comercializa bajo la marca Xtone. Se trata así de la cuarta planta de la empresa, para la que se han contratado a 125 personas y con la que se prevé una producción anual de 1.300.000 metros cuadrados.
Asimismo, durante 2022, el grupo empresarial inauguró diferentes tiendas propias dentro del territorio nacional: València, Barcelona y Madrid. Todo ello en una estrategia para trasladar parte de sus colecciones hasta las zonas comerciales de las grandes ciudades para acercarse al cliente final y a los profesionales del sector. Pero además, ya ha anunciado que durante este año seguirá su expansión con la apertura de ocho nuevos puntos de venta en localidades como l'Hospitalet de Llobregat o Marbella, así como en el extranjero: en Estados Unidos, en Sudamérica y en el norte de Europa.