VALÈNCIA. La entrada en servicio de la nueva terminal de contenedores del Puerto de Valencia, que ampliará su capacidad en cinco millones de TEU (contenedores de veinte pies), implicará la duplicación del tráfico de camiones actual, por lo que el retraso en la ejecución de un nuevo acceso por el norte supondrá el colapso de la única entrada de la que dispone actualmente por la V-30.
Esa es una de las primeras conclusiones del estudio que la Asociación de directivos y empresarios logísticos Propeller Valencia, la Cámara de Comercio y la Confederación Empresarial de la Comunitat (CEV) han encargado a la Universitat Politécnica de València sobre las necesidades infraestructurales y el impacto socio-económico de la ampliación norte del Puerto de Valencia.
El presidente del Propeller, Pedro Coca, ha adelantado durante un encuentro con medios de comunicación algunas de las cuestiones que pondrá de relieve ese estudio, que será presentado en septiembre. Con motivo del mismo, el responsable de esta entidad cuyo fin es impulsar la generación de empleo y riqueza en el ámbito logístico-portuario ha reclamado que se impulsen algunas de esas infraestructuras pendientes.
En concreto, ha considerado absurdo que un puerto como el de Valencia, con un volumen anual de tráfico que supera los cinco millones de TEU solo disponga de un acceso, por lo que ha destacado la urgencia de que se resuelva definitivamente la realización de una entrada alternativa por el norte. Dado que el Puerto de Valencia no tendrá posibilidades de expansión una vez realizada la ampliación norte, ha subrayado la necesidad de mejorar la interconexión con el Puerto de Sagunto y la comarca del Camp de Morvedre, una de las principales zonas logísticas del sur de Europa gracias al desarrollo de Parc Sagunt
Pedro Coca ha advertido que a partir de 2025, cuando se desarrolle la segunda fase de la ampliación norte del puerto, la V-30 y la Pista de Silla alcanzarán un nivel de "bloqueo máximo" y el tráfico en estas carreteras se quedará "parado". Sin embargo, se ha mostrado convencido de la realización de los nuevos accesos porque, de lo contrario, una compañía como MSC no se habría comprometido a invertir 1.400 millones de euros para construir y explotar la nueva terminal.
El estudio encargado por el Propeller concluye también que, pese al aumento de la actividad, este nuevo acceso permitirá una disminución de 60.000 toneladas de CO2 al año, dado que evitaría a gran parte de los camiones que ahora acceden por el sur tener que recorrer varios kilómetros.
El presidente de la asociación ha destacado que, con la ZAL del Puerto de Valencia como "joya de la corona", los puertos de Valencia y Sagunto, junto con el Corredor Mediterráneo -con la terminal intermodal de Fuente de San Luis- y Parc Sagunt I y II pueden hacer de la Comunitat un gran centro logístico, pero ha lamentado que falta suelo.
Por otro lado, Coca se ha mostrado convencido de que las navieras van a ser las que empujen el transporte ferroviario de mercancías, una modalidad que sigue siendo, a su juicio, una gran asignatura pendiente en España. Al respecto, el vicepresidente de la asociación, Alfredo Soler, ha recordado que las diez grandes navieras que hoy en día controlan el 80% del tráfico marítimo están profundizando en una política de empresa "vertical" con el objetivo de "controlar todos los eslabones de la cadena hasta el final".