VALÈNCIA (EFE). El president de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha defendido que el Estado debe avanzar hacia la "descentralización real de las instituciones", por ejemplo situando sedes oficiales fuera de Madrid.
"No tienen que residenciarse todas las instituciones en Madrid. ¡Si está en Madrid hasta el Instituto Oceanográfico! Oiga, pues que esté en Vigo o en Cádiz, pero ¿también tiene que estar esto en Madrid? ¿Todas las instituciones del Estado tienen que estar en Madrid? No hay ningún razonamiento que sostenga esta cuestión", ha expuesto.
Ha sido durante su intervención en la segunda jornada de la XXXVI Reunión del Cercle d'Economia, en un debate sobre el modelo territorial español en el que también han intervenido la presidenta de las Islas Baleares, la también socialista Francina Armengol, y los presidentes populares de Galicia y Andalucía, Alberto Núñez Feijóo y Juan Manuel Moreno Bonilla, respectivamente.
Durante su intervención, Puig ha reivindicado que España debe consolidar el modelo de "cogobernanza" que se ha perfilado durante la gestión de la crisis de la covid-19, estableciendo unos parámetros que hagan que la cooperación no dependa de la voluntad política del gobierno de turno.
"Si no quieren llamarle federalismo a mí me da igual: hagan federalismo sin llamarle federalismo, pero hay que hacer fórmulas de cooperación", ha subrayado.
El president, que ha abogado por frenar la crispación y promover un "reencuentro emocional" entre los españoles, ha lamentado que "a veces desde las élites centralistas no se entiende que la España que se dibuja en algunos cenáculos de Madrid no tiene que ver con la España real".
En su opinión, para que el modelo institucional refleje y dé cabida a esa "España real" hay que actualizar el modelo territorial, acabando con el "megacentro" de Madrid y dando más peso a las regiones "periféricas".
Para lograr ese mayor equilibrio, ha sostenido, es imprescindible abordar una reforma del modelo de financiación autonómica que garantice la "suficiencia", para poder sufragar como es debido los servicios públicos con competencias transferidas, y la "equidad" en el reparto de fondos entre los distintos territorios.
Puig ha llamado al resto de gobiernos autonómicos a arremangarse, a "sentarse y a dialogar" para poder actualizar "lo antes posible" un modelo que lleva años obsoleto.
"Solo hay consenso en que no estamos de acuerdo en el sistema, ahora hay que pasar del consenso a la contra al consenso a favor", ha recalcado.