Foto: EFECASTELLÓN (EFE). El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha pedido hoy al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que impulse "un gran acuerdo sobre infraestructuras estratégicas deseable en toda España y que reclamamos para la Comunitat Valenciana".
Puig ha hecho estas declaraciones hoy en Castellón donde Rajoy ha inaugurado el tramo Valencia-Castellón del Corredor Mediterráneo que permitirá la conexión de alta velocidad entre Madrid y Castellón y que entrará mañana en funcionamiento.
El nuevo servicio AVE reducirá el tiempo de viaje entre Madrid y Castellón en 37 minutos y tardará poco más de dos horas y media.
El acto ha contado además con la presencia del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna; la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco; el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues; la consellera de Infraestrucuras, María José Salvador, y el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner.
También ha contado con la presencia del presidente de Renfe, Juan Alfaro y el presidente de Adif, Juan Bravo, y representantes empresariales como el presidente del grupo Pamesa, Fernando Roig, el presidente de Porcelanosa, Manuel Colonques, el presidente de Mercadona, Juan Roig, el presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios, Vicente Boluda. y el presidente de la patronal azulejera ASCER, Vicente Nomdedeu.
Durante este acto, medio centenar de personas se han concentrado a las puertas de la estación convocados por la Plataforma de Defensa del Ferrocarril para protestar por las consecuencias negativas que aseguran tendrá la alta velocidad para los trenes de Cercanías a partir de mañana y que podrían "conllevar una supresión del servicio de hasta el 50%", según ha explicado el portavoz de la plataforma Juan Ramón Ferrandis.
Puig ha dicho que la puesta en marcha de la infraestructura es "un paso más, ni el más importante, ni el definitivo", al tiempo que ha asegurado que el Corredor Mediterráneo "ha despertado un consenso histórico entre la sociedad civil, entre el conjunto de empresarios, trabajadores y fuerzas políticas".
Ha indicado que Europa "ya es consciente de la necesidad de avanzar rápidamente en la construcción del Corredor y cada día lo son también más ciudadanos de toda España".
Ha asegurado que el acto de hoy "debería despertar la esperanza de que no se amplíe la lista de retrasos, cambios de proyecto y reprogramaciones que, durante lustros, han restado impulso a la construcción del Corredor Mediterráneo".
Es, a su juicio, "un objetivo leal con los intereses de la Comunitat y con los del conjunto de España" porque, ha añadido, "las comunidades autónomas del Corredor aportamos el 50 % de la población, el 45 % del PIB, el 47 % del tejido productivo, el 46 % del empleo y el 51 % de las exportaciones".
Según el jefe del Consell, "estamos aún demasiado lejos de ese horizonte y también, de lo que necesita el Castellón vivo y dinámico" que además, "aporta el mayor superávit comercial relativo de la Comunitat Valenciana y que avanza, año tras año, en la creación de nuevos viveros de turismo".
Ximo Puig ha asegurado que el tren "ha de unir ciudades lejanas, pero también territorios cercanos" y por ello ha dicho que "sí a la llegada del AVE y sí a las Cercanías".
En este sentido ha agradecido al ministro Íñigo de la Serna "sus visitas a nuestra Comunitat y su interés en proyectos que integran la Agencia Valenciana de Infraestructuras".
Ha afirmado que "las infraestructuras no saben de legislaturas o partidismos" y ha asegurado que ha llegado el momento de "mejorar la eficiencia y planificar desde el acuerdo, huyendo del cortoplacismo, la improvisación o la arbitrariedad".
