VALÈNCIA (EP). El 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, ha garantizado que "se llegará al final de las consecuencias" en la investigación sobre la muerte por una parada cardiorrespiratoria de un hombre en la Ciudad de la Justicia de València y si el hecho de que las baterías del desfibrilador estuvieran descargadas tuvo alguna relación.
Eso sí, ha advertido que ve como "un atrevimiento enorme vincular una muerte a un aparato", ante las críticas de la presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, en la sesión de control del pleno de Les Corts de este jueves.
Puig ha insistido en que le parece una "temeridad" apuntar al desfibrilador como causa directa del fallecimiento hasta que no finalice la investigación.
La alerta por los fallos en el desfibrilador saltó a la luz pública el pasado jueves, cuando un hombre que iba a ser juzgado en la Audiencia de Valencia por drogas sufrió una parada cardiorrespiratoria y el aparato no tenía batería.
"Evidentemente, llegaremos hasta el final de las consecuencias", ha recalcado el también líder del PSPV, defendiendo que el Consell ha dado "explicaciones desde el primer momento" y advirtiendo a Bonig que es responsable de "sus palabras".
Como consellera de Justicia, Gabriela Bravo ha tomado la palabra para coincidir con Puig en que la Generalitat ha "exigido respuestas y abierto una investigación desde el primer momento", además de "dar completa información a todos los operadores jurídicos". "Somos un gobierno responsable, no como el del PP", ha aseverado.
En esta línea, Bravo ha recordado la fecha del "3 de julio de 2006", la del accidente de Metrovalencia que dejó 43 fallecidos, denunciando que el anterior gobierno del PP aportó "cero respuestas y cero respeto a las víctimas".
"Este Consell no actúa como ustedes, que construyeron una Ciudad de la Justicia en ruinas, con unos sobrecostes que nunca se aclararon, y nunca se preocuparon de su mantenimiento", ha replicado a las críticas de los 'populares', para destacar el gasto de "12 millones en seguridad y mantenimiento" en estas instalaciones judiciales de València y remachar con el refrán "de aquellos polvos, estos lodos".
Por parte del PP, la síndica Bonig ha hecho hincapié en que la Generalitat "solo tenía que mantener el desfibrilador pero desde mayo de 2018 no ha hecho nada", mientras que el diputado José Císcar ha lamentado la "impotencia, rabia e indignación que se sintió cuando una persona se desplomó y un desfibrilador no funcionaba".
"No es solo una falta de previsión ni de pilas, es la irresponsabilidad de un Consell", ha subrayado el 'popular', criticando que "en otras épocas" los partidos del Botànic --PSPV, Compromís y Unides Podem-- dijeran que "los recortes matan" y asegurando que "no es el estilo" de su partido.
En este contexto, el PP exige que "se lleven a cabo destituciones en el actual gobierno" tras el fallecimiento en la Ciudad de la Justicia, ante "la sensación de que quieren romper esa cadena por el eslabón más débil, una directora general que ya no está". "¿Depurará las responsabilidades que sean atribuibles al gobierno actual en forma de ceses?", ha preguntado Císcar a Puig.