Dombrovskis y Puig, en su cita de este martes. Foto: GVACASTELLÓ. El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, pide a la Comisión Europea una "acción ofensiva para mantener las empresas" del sector azulejero. Así lo ha trasladado estos días en diferentes reuniones en Bruselas. En ellas ha comunicado a los gobernantes comunitarios que la industria europea "y la valenciana, en particular, están en peligro" por los precios del gas. No en vano, los desmesurados costes energéticos han comenzado ya a cobrarse las primeras bajas, con Todagres y Azulejera Alcorense, que han anunciado ya los cierres de sus plantas productivas.
De esta manera, Puig ha remarcado al vicepresidente ejecutivo de la Comisión para el Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, y al de Economía al Servicio de las Personas, Valdis Dombrovskis, la necesidad de lograr una armonización de las ayudas directas para evitar la distorsión de la competencia entre países. "Pedimos equidad e igualdad de oportunidades", ha indicado ante los medios.
Esto mismo es lo que ya señaló Puig en la reciente edición de Cersaie, cuando se entrevistó con el sector cerámico, que le trasladó cómo Italia ha implementado desgravaciones fiscales que suponen un soplo de aire fresco para su sector cerámico frente a los disparados costes del gas.
Ahora, ha apuntado el jefe del Consell, el Ejecutivo estatal, a quien corresponde en última instancia la posibilidad de implementar estas desgravaciones siempre que lo permita la normativa propia, ya conoce esta vía. "Estamos hablando con el Gobierno de España para que se implementen las mismas ayudas que en Italia", ha apuntado Puig a las puertas de la Comisión Europea en la capital comunitaria.
También lo ha trasladado a los responsables europeos, a los que ha solicitado "medidas paliativas" y "ayudas directas" ante una situación de precios del gas "que hace inviable la actividad en el sector". Todo ello, reconoce, acompañado de un "cambio estructural" hacia nuevas fuentes de energía, como "el hidrógeno o las renovables". En este sentido, Puig ha señalado que hay un "alineamiento" de la postura de la Generalitat "con las obligaciones europeas".
En la cita con el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Drombrovskis, también se ha abordado el comercio exterior con Argelia, que tantos quebraderos de cabeza trae para el clúster cerámico, en este caso no tanto a la industria azulejera como a sus hermanas de las fritas y la maquinaria.
En este sentido, según fuentes de la Generalitat el president ha insistido en la necesidad de que los acuerdos comerciales se respeten, y por tanto también la acción de las empresas de la Comunitat Valenciana en el país. No en vano, la dificultad de cobrar pedidos ya remitidos y la imposibilidad de implementar nuevos están lastrando sobremanera el comercio de estas dos ramas económicas castellonenses con uno de sus principales mercados.
