VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Quart de Poblet sustituirá durante los próximos meses las luminarias tradicionales existentes en el municipio por nuevas de tecnología LED de última generación. De esta manera se pondrá solución a las incidencias que vienen ocurriendo en las luminarias viarias
El Consistorio sustituirá 2.501 puntos de luz que aún disponen de tecnología antigua. Muchas de las farolas con esta tecnología se encuentran en la Avenida San Onofre, uno de los lugares donde antes se instalará este sistema de iluminación más eficiente y que, además, proporcionará un color de luz más agradable y con menor contaminación lumínica.
Quart de Poblet será, en breve, uno de los municipios de España que tendrá el 100% de sus luminarias con tecnología LED de última generación. De esta forma, se reducirá, además, el consumo energético del municipio en un 50% lo que disminuirá a su vez la factura de la luz que paga el Ayuntamiento. La intensidad de la luz se adaptará en función de las necesidades gracias a la regulación escalonada y preprogramada y se podrá controlar mediante un sistema inalámbrico.
Además, esta sustitución supondrá una reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera de más de 400 toneladas al año, por lo que se sigue en la línea de actuación municipal de una clara apuesta por el ahorro energético y la reducción de emisiones contaminantes para conseguir la neutralidad climática y frenar el cambio climático.
Cabe recordar que en los nuevos desarrollos urbanísticos, como el PAI Molí d'Animeta, ya se instalaron farolas con luminarias LED. Además, la reurbanización de calles como la que se ha acometido en el barrio Río Turia también conllevó la renovación de las luces con tecnología de bajo consumo. El municipio tendrá en los próximos meses la práctica totalidad de su iluminación viaria modernizada, sostenible y ecológica con la que también se reducirá la contaminación lumínica.
Esta actuación será posible gracias a la subvención de más de 1,1 millones de euros otorgada por el Fondo Europeo Regional, (FEDER), a través del instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, IDAE. El FEDER, que aporta el 50% del coste del proyecto (valorado en más de 2,2 millones), considera que este cambio en la iluminación viaria favorece el tránsito hacia una economía baja en carbono y que cumple el objetivo específico de lograr la eficiencia energética en las infraestructuras y servicios públicos. El 50% del coste no financiando pro Europa, lo asume en un 25% la Diputación y el 25% el ayuntamiento de la localidad.
A la renovación lumínica se sumará la implantación de un sistema de gestión a distancia del funcionamiento de las farolas. El Plan Director Smart City incluye el control remoto de los servicios públicos para garantizar su correcto funcionamiento, detectar incidencias en tiempo real y vigilar el consumo eléctrico. En un futuro, toda la instalación se controlará a través de la Plataforma Smart City. En este sentido, el riego por goteo o el tráfico rodado también serán gestionados de manera remota para optimizar todas las prestaciones municipales.