Reinicio

Rentrée significa para muchos vuelta a la realidad, aunque para otros lo sea a la rutina. Pero también equivale a reencuentro y descubrimiento. Nuevos discos, exposiciones, libros, espectáculos teatrales, conciertos, representaciones operísticas...Tiempo al tiempo. No puedo negar que en algunos casos se han superado las expectativas pese a las dificultades económicas por las que atraviesan las instituciones, y también que el sector privado y de barrio no ha querido perder comba por encima de esperanzas. En otros casos, de momento, poco parece haberse movido. En algunas instituciones públicas del cap i casal se echa en falta discurso y sobre todo existe la sensación de un cierto vacío integral. Otros apuestan por llevar la cultura al barrio, que no es mala idea, pero aún ha de ser un todo más concreto.

Llevamos días saltando de espacio en espacio volviendo a la cruda realidad. Ya tenemos ofertas sobre la mesa, modificaciones sobre las previsiones incluidas. Pinta la temporada de Les Arts y la oferta del Palau de la Música pese a sus circunstancias y estrecheces. Como también, el calendario del IVAM -a ver si alguien le da un empujón auténtico al jardín de esculturas- que este año ha tenido un detalle, su implicación en la cita Abierto Valencia que ayer se celebraba con la apertura simultánea de las galerías de arte agrupadas en l’Associació de Galeries d’Art Contemporani de la Comunitat Valenciana (LaVac).

Este año el instituto colabora con la iniciativa destinando 12.000 euros a la compra de obras de arte. Es una forma oportuna de animar al sector y a los artistas. El organismo valenciano mantiene su apuesta por recuperar su reintegración en una sociedad que dejó de ver al IVAM como faro de referencia artístico, pero igual va demasiado lejos en otras parcelas.

El sector de las galerías de arte aguanta la penitencia como puede. Y no por la falta de esfuerzo y calidad de muchas de sus exposiciones sino por las dificultades con las que todavía debe enfrentarse a causa del deterioro económico y el miedo que acompaña al coleccionista de a pie. Por suerte, las ferias que se celebran por España ayudan a mantener el tipo y sirven como ventanas para huir de la asfixia interminable. Así ha sucedido en la reciente Estampa donde las galerías valencianas han sido este año protagonistas.

El Colegio Rector Peset ha apostado por Alfaro y su serie en torno al jazz. Una gran parte se vio ya hace años en la galería Rosalía Sender, pero está bien su revisión. Hasta el vicerrector de Cultura Antonio Ariño guardó cola.

A otros les toca regresar bregando con las fundaciones que nos han dejado el agujero de la lujuria y el desenfreno, entre ellas, la Jaume II El Just de Benavent/Camps/Campos de la que ya nos ocupamos en su día.

El Secretario Autonómico de Cultura, Albert Girona, daba esta misma semana cuenta económica del futuro y pasado demoledor de la fundación. No sé por qué Girona no da nombres de los que ahora no quieren saber nada ni asumir compromisos cuando bien se beneficiaron de las barbacoas.

Crónica de los Crónica

Abría el Principal con una obra que quizás/seguro podría haber tenido mejor acomodo en otros espacios y además ya estuvo por aquí. La Diputación que ahora coprograma el escenario de la calle de las Barcas junto a CulturArts sabrá lo que hace. Faltó público en su reeeeestreno. Las dos producciones previstas -lo de Bretch es inédito y de su adaptación se han ocupado Juan Vicente Martínez Luciano y Salvador Vendrell- y el resto de la oferta anima a conservar esperanzas. El Talía de los Fayos, que no para ni en verano, proponía el debate político en forma de función con el montaje Debate. Oportuno y clarividente después de lo que estamos viendo estos días en el mundo/espectáculo de la política.

Pero si hay un espacio que ha inaugurado su temporada a lo grande -las muestras de Pinazo en el IVAM y el MuVIM ya la comentamos hace unas semanas- ha sido la Fundación Bancaixa en su centro cultural con la exposición de Sean Scully y su mujer Liliane Tomasko, comisariada por Javier Molins, pero sobre todo con la retrospectiva del Equipo Crónica.

Posiblemente esa muestra que reúne más de 160 piezas del trío y luego dúo formado por Rafael Solbes, Manuel Valdés y Juan Antonio Toledo hasta su salida, queda ya como una de las mejores exposiciones que se verán este año, sin menospreciar, de momento, el resto.

Desde que el IVAM expuso a finales de la década de los ochenta la primera gran exposición dedicada al grupo valenciano, la obra del Equipo Crónica había estado presente por aquí a base de pinceladas sueltas o revisiones puntuales como la que el propio museo les dedicó en 2007 a través de las obras de su propia colección, la más completa. Pero no del nivel que ahora propone La Fundación Bancaixa en colaboración con La Caixa y bajo la mirada de Tomás Llorens y su hijo Boye.

Muchos nos quedamos desencantados en su día al comprobar cómo la segunda/primera gran retrospectiva de los Crónica organizada por el Museo de Bellas Artes de Bilbao en mayo de 2015 se quedaba sin itinerancia inmediata y posibilidad de acceso salvo a través de su catálogo y nadie la reclamara. Pensábamos que se perdía una gran oportunidad ya que las circunstancias de los préstamos así obligaban. Por suerte no ha sido así.

Con un 10% de obras más que la expuestas en Bilbao pero sobre todo con la oportunidad de poder contemplar obras de colecciones privadas tantos españolas como extranjeras que quizás jamás vuelvan a salir o nunca habían sido exhibidas con anterioridad al espectador, la muestra del Equipo Crónica es apabullante en todos los sentidos: desde la propia relectura, presencia, calidad de los fondos hasta iluminación y montaje. Permite, además de observar la obra de Valdés/Solbes agrupada en series, adentrarse en los antecedentes en Estampa Popular e incluso conocer su realidad en el contexto de la Valencia de los sesenta. Una propuesta que reafirma la potencia del Equipo Crónica, su intencionalidad, originalidad, influencia y verdadero peso en el contexto del arte contemporáneo. Menuda crónica social se hubiera podido escribir con Carmen Calvo, Pepe Sanleón, María Irene Beneyto, Carmen Alborch o Pepe Cataluña, como protagonistas junto a coleccionistas de los Crónica como Francisco Fandos o Guillermo Caballero de Luján.

Hemos comenzado bien. Hasta con jazz con Ñ en el Rialto coincidiendo con los veinte años de la muerte de Miles Davies y la despedida de Antonio Martínez de la SGAE-Valencia.

Ahora espera Mostra Viva. Nos devolverá a ciertos momentos de esplendor y participación social en muchos puntos de Valencia, como por ejemplo, y de la mano de la catedrática y académica Amparo Carbonell, con la muestra Mar de Murs prevista para el jueves en el Octubre Centre de Cultura Contemporània y en la que participan más de cien artistas y creadores. Una auténtica sorpresa de originalidad. 

Para rematar el productor y promotor de jazz Julio Martí, director de Serious Fan Music, cita para la fiesta de su 60 aniversario en Veles e Vents. Y yo aún sin peinar.