Hoy es 15 de octubre
Informe elaborado por Enrique Díaz-Alvarez, Matthew Ryan, Roman Ziruk e Itsaso Apezteguia
En una semana relativamente tranquila, los mercados celebraron la noticia de que las autoridades chinas iban a lanzar un nuevo y agresivo paquete de estímulos para frenar el desplome del mercado inmobiliario y apoyar la inversión y el consumo. Los precios de las materias primas subieron en general, lo que se reflejó en los mercados de divisas. Algunas de ellas fuertemente vinculadas a las materias primas, como el peso chileno y el real brasileño, encabezaron los rankings semanales de rendimiento, mientras que el euro, la libra esterlina y el dólar cerraron la semana sin cambios.
Esta semana todo gira en torno al informe de nóminas estadounidenses de septiembre, que se publicará el viernes. El informe de inflación PCE de la semana pasada confirmó que la inflación en EE.UU. ha vuelto efectivamente al objetivo de la Reserva Federal, y ahora el foco de atención está puesto en calibrar la resistencia del mercado laboral estadounidense. Por su parte, la inflación interanual de la zona euro del martes no parece que vaya a ser un obstáculo para un recorte de tipos del BCE en octubre, ya que el consenso espera otro dato de inflación débil y se acumulan los datos económicos pesimistas.
El goteo constante de malas noticias económicas que llegan de la Eurozona no da señales de cesar.
La semana pasada, los índices PMI, quizá el indicador adelantado más preciso de la actividad económica de la zona, cayeron a un nivel consistente con una contracción económica absoluta. El sector manufacturero se encuentra en medio de una profunda recesión, mientras que el sector servicios está estancado. En combinación con los débiles datos de inflación de España y Francia, la noticia parece haber sellado un recorte en la próxima reunión del BCE en octubre, y los comunicados de los miembros parecen confirmarlo. No parece probable que los datos de inflación del martes cambien esta situación, y creemos que el repunte veraniego del euro podría haber llegado a su fin.
Las noticias sobre la situación económica en EEUU siguen confirmando que la Reserva Federal está logrando un aterrizaje suave. En septiembre, la inflación medida por el índice PCE fue inferior a las previsiones, y el subíndice subyacente ha vuelto claramente al objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal. Mientras tanto, los datos publicados hasta ahora son coherentes con un crecimiento superior al 3%, aunque hay que admitir que es muy al principio del trimestre.
Aunque las elecciones presidenciales de noviembre siguen estando en el aire y arrojan un manto de incertidumbre, creemos que la Reserva Federal probablemente retomará un ritmo prudente de recortes de tipos en 2025. El informe de nóminas de este viernes debería volver a ser coherente con un mercado laboral que está generando un modesto crecimiento del empleo, pero que se mantiene cerca del pleno empleo.
Los datos del índice PMI de actividad empresarial de septiembre fueron algo inferiores a lo esperado, pero siguen siendo coherentes con una expansión económica constante tanto en el sector servicios como en el manufacturero, lo que contrasta claramente con las terribles lecturas al otro lado del Canal de la Mancha.
Estos buenos resultados económicos, combinados con la cautela del Banco de Inglaterra a la hora de recortar los tipos, deberían ayudar a la libra a seguir subiendo frente al euro en las próximas semanas.