VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria cerró el presupuesto de 2020 con un superávit de 1,4 millones de euros, incluso a pesar de la pandemia de la covid-19. Del mimo modo, también aumentó el remanente de tesorería hasta los 4,4 millones. Así lo ha informado el equipo de gobierno, conformado por el PSPV, ante el resto de partidos.
Las cuentas del pasado ejercicio presupuestario "confirman la trayectoria emprendida durante los últimos años con superávits cuyas cuantías sirven para dedicarlos a inversiones públicas", han explicado desde el consistorio. De hecho, en el año 2019 el superávit ascendió a 1,9 millones de euros, otros 3,1 millones en 2018 y 1,5 en 2017, tal y como han relatado.
En este mismo sentido, el equipo de gobierno también ha informado de que el pasado ejercicio supuso unos ingresos ordinarios que alcanzaron los 28 millones de euros frente a los 28,3 millones en gastos municipales, de forma que el superávit se concretó en los 1’4 millones de euros en total, tras los ajustes económicos que se llevaron a cabo.
Los 1’4 millones de euros de superávit se podrán destinar a las distintas inversiones públicas municipales que se consideren necesarias ya que, tras la suspensión de las reglas fiscales que se pusieron en marcha por parte del Ministerio de Hacienda, no tendrán que dedicar a amortizar deuda ni tampoco para llevar a cabo inversiones financieramente sostenibles como se venía haciendo hasta ahora.
La liquidación del pasado ejercicio presupuestaria contiene, además, las diversas ayudas y subvenciones públicas recibidas por parte de las diversas entidades y organismos autonómicos y provinciales, como los 4 millones de euros de la Generalitat Valenciana y la Diputación de Valencia o los 953.000 euros del Instituto Valencia de Competitividad Empresarial (Ivace) destinados a la modernización de los polígonos industriales de Riba-roja de Túria.
El equipo de gobierno también ha dado cuenta del resultado del remanente de tesorería, cuya información refleja los déficits o superávits que se han ido acumulando a lo largo de los ejercicios precedentes. De esta forma, el remanente actual asciende a 4’4 millones de euros, es decir, un aumento de hasta 304.000 euros respecto del ejercicio anterior y cuya cuantía se destinará a inversiones municipales.
El informe económico municipal "constata la buena salud financiera de las arcas públicas del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria, que se han traducido en el cumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria y de la regla de gasto que puso en marcha el Ministerio de Hacienda con un control de los ingresos y gastos", han relatado.
El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, ha afirmado que el superávit generado en las cuentas del ejercicio del año 2020 "refleja el encomiable trabajo que se hace en los diversos departamentos municipales, que nos permite encarar con un optimismo moderado el futuro próximo, con ayudas a las familias más vulnerables, subvenciones a los sectores económicos y a las personas que sufren con mayor fuerza las consecuencias de la pandemia y una continuación de las inversiones necesarias; todo ello, sin aumentar la carga fiscal e incrementando las prestaciones sociales".
