Riba-roja empieza a apartar vehículos del área industrial tras sacar a los trabajadores

VALÈNCIA (EP/EFE). El Ayuntamiento de Riba-roja (Valencia) ha empezado a apartar coches y camiones amontonados en el área industrial, de donde ya han salido prácticamente a todos los trabajadores que han tenido que pasar las noche en las empresas a consecuencia de las inundaciones provocadas por la dana.

Así lo ha explicado a EFE el alcalde del municipio, Robert Raga, que ha asegurado que la zona industrial "ha mejorado bastante en cuanto al personal. Todos los trabajadores están fuera".

"De los que tuvieron que quedarse la noche desde ayer ya hay muy poquitos; hay muy poca actividad; ya no llueve y algunos se han quedado en las empresas", ha añadido.

Raga ha informado que de los 800 trabajadores que han salido de las empresas de los polígonos tras pasar allí la noche, apenas quedan unos 200 en los dos colegios que el municipio ha habilitado para atenderlos. "Poco a poco se están yendo con sus familiares conforme se abren vías de comunicación", ha señalado.

"Ahora estamos en labores de apartar los coches y los camiones que están amontonados en las naves industriales para que el tráfico empiece a fluir", ha concluido.

Noche traumática

El municipio de Riba-roja de Túria vivió una noche "traumática" por el "caos" que han provocado los efectos de la Dana en la localidad, con centenares de trabajadores que han tenido que pasar la noche en empresas del polígono industrial al verse atrapados por el agua. "Una situación muy dramática (...), está bloqueado todo, es como una ratonera".

De esta manera lo ha explicado a Europa Press el alcalde Robert Raga, que ha asegurado que los daños provocados por el episodio de precipitaciones son "muy cuantiosos" en "todos los sentidos", especialmente en materia de infraestructuras. "Hay centenares de camiones y coches atascados en las calles del polígono, es un caos bastante importante", ha descrito.

Unos daños, ha indicado, ocasionados por el desbordamiento del río, que ha provocado la rotura de dos puentes, lo que a su vez ha provocado que el municipio haya quedado "incomunicado". "Está bloqueado todo, es como una ratonera", ha afirmado. Además, a ello se suma que este martes se tuvo que desalojar parte de la urbanización Masia de Traver hasta que "baje el agua".

Ha sido una noche "muy traumática" en Riba-roja, ha asegurado el responsable municipal, que ha subrayado que ni en el consistorio ni la Policía Local y los demás servicios "han descansado". "Estamos bloqueados por todos los sitios, jamás habíamos visto esta cantidad de agua en tan poco tiempo", ha reconocido.

Raga ha afirmado que no tienen constancia de que ninguna de las 51 víctimas mortales que deja el primer balance de fallecidos por la DANA en la provincia de Valencia se haya registrado en la localidad, aunque se ha mostrado "muy preocupado" por esta situación.

Paralelamente, ha explicado que el Ayuntamiento está evacuando durante la mañana de este miércoles a los trabajadores que han tenido que pasar la noche en empresas del polígono por el desbordamiento de ríos y barrancos, unos 800 en total. Además, ha habilitado dos colegios públicos como puntos de recolección de mantas y ropa de abrigo para ayudar a los afectados.

El municipio ha quedado "todo incomunicado" porque la autovía A-3 está "bloqueada" y el metro está sin servicio, por lo que los trabajadores no pueden regresar a sus casas. Ante esta situación, el consistorio, mediante sus servicios sociales, ha proporcionado servicio de comida y agua y ha ofrecido psicólogos a los afectados. Asimismo, ha fletado autobuses para trasladar a los trabajadores del polígono El Oliveral hasta el casco urbano.

Evacuación de 700 trabajadores

El municipio de Riba-roja de Túria ha rescatado ya a unos 700 trabajadores que habían quedado atrapados por la dana en la gran área industrial del municipio, donde hay 1.400 empresas, y ha tenido que desalojar a las familias de unas 60 viviendas cercanas al río Túria, que se ha desbordado, aunque este miércoles ya están regresando a sus casas.

Así lo ha indicado a EFE su alcalde, Robert Raga, que ha sostenido que la situación "sigue siendo muy complicada pero ya no hay riesgo porque ya no llueve y han bajado las aguas".

"Hemos sacado ya a unos 700 trabajadores y están en el pueblo porque no pueden ir a ningún sitio", ha afirmado, a la par que ha explicado que han habilitado dos colegios, el Miguel de Cervantes y el Camp de Túria, para atenderlos.

"Son vecinos del área metropolitana pero como está todo colapsado no pueden irse a sus viviendas. En los colegios los atendemos. Algunos tenían pequeñas heridas y los hemos llevado al centro de salud aunque en general están en buenas condiciones".

Ha incidido en que les ofrecen comida y están pidiendo mantas y ropa "para que puedan cambiarse porque llevan fango por todo el cuerpo".

"Todavía hay gente en las empresas y, aunque no están en peligro, llevan allí 24 horas y la situación es complicada, no pueden ir a ningún sitio porque está todo cortado, están incomunicados", ha añadido.