VALÈNCIA (EFE).- Los concejales del Ayuntamiento de València con dedicación exclusiva cobrarán 68.171 euros brutos anuales, mientras los que no tienen dedicación exclusiva percibirán 63.500 euros, según ha comunicado este viernes el alcalde, Joan Ribó, a los portavoces de los grupos municipales.
Ribó ha explicado que ha decidido que el salario de los ediles sin dedicación exclusiva se calcule a partir de los concejales que sí la tienen, y ha destacado que el montante resultante es "casi igual", según han indicado fuentes de alcaldía.
La portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, ha señalado que les han comunicado que las dedicaciones exclusivas estarán en el equipo municipal y que el 50 % de los integrantes de la oposición tendrán dedicación parcial, lo que les "abocan a tener una dedicación no completa" al Ayuntamiento.
Catalá ha afirmado que la oposición tiene una labor "fundamental" en el Consistorio y que hay unos derechos que "proteger y conservar", pues los ciudadanos les han votado para que hagan una labor de fiscalización de la actuación del Gobierno local.
Por parte de Ciudadanos, Fernando Giner ha detallado que el alcalde, al explicar la medida, ha citado como partidos en la oposición a PP, Cs y Vox, un hecho que él interpreta como que "han reconocido que hay acuerdo de gobierno". Por ello, cree que "todo lo que están manifestando [Compromís y PSPV] es teatro".
"Tienen un acuerdo que no nos están contando", ha aseverado, antes de criticar que se "reparten el pastel de la ciudad" y que la actitud del alcalde es "mucho más presidencialista que antes".
Ha señalado que en la reunión de portavoces desde Compromís "han traído un parámetro y una valoración personal para cada uno de los criterios diciendo que eso es lo que hay". "Muy poco abierto a lo que es el diálogo y dejando a la oposición muy poco margen de maniobra para que podamos hacer nuestro trabajo", ha agregado.
Por su parte, el portavoz de Vox, José Gosálbez, ha manifestado que Ribó les ha dejado "un poco fuera de juego" con su "decisión política de que todas las dedicaciones exclusivas estén solo en el Gobierno y que no haya nadie en la oposición con dedicaciones que no sean parciales".
Fuentes de alcaldía han replicado que "es totalmente falso" que los ediles de la oposición "se queden sin cobrar, como ha insinuado la portavoz del PP", y ha defendido que 63.500 euros es un salario "más que digno, que se ha calculado precisamente para favorecer" que los ediles de la oposición puedan dedicarse a su tarea democrática de fiscalización del gobierno municipal.
Las mismas fuentes han añadido que este cálculo se ha hecho "a pesar de la restrictiva ley estatal que propició el mismo PP desde el gobierno central", pues es una ley de rango estatal la que marca la limitación de dedicaciones exclusivas de los concejales de cualquier Ayuntamiento de España.