Joan Ribó (Foto: Eva Máñez)VALENCIA, (EP). El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha insistido en que la propuesta del Consistorio sobre las zonas de gran afluencia turística es pasar de cinco a una, en el entorno de la Lonja, y ha indicado que otra cosa es que estén "obligados" a modificarla tras hablar con los afectados, pero no le "gustaría cambiar".
Ribó, quien ha hecho estas declaraciones a los periodistas ante la reunión del Consell Local de Comercio esta tarde para tratar la regulación de las zonas de afluencia turística, ha explicado que hoy se han entregado en el Ayuntamiento 21.000 firmas pidiendo la conciliación familiar de los trabajadores de las grandes superficies comerciales.
El alcalde ha señalado que la propuesta del Consistorio "es muy clara", y consiste en "cumplir la ley estatal", con una zona de afluencia turística alrededor de la Lonja, donde "casualmente" no hay "ningún gran centro comercial".
En principio, ha expuesto, los grandes centros comerciales deben estar cerrados "todos los domingos", porque eso favorece la conciliación familiar de sus trabajadores y que la competencia esté aproximadamente en igualdad de condiciones con el comercio local, que es fundamental para la supervivencia de los barrios.
"Ahora veremos qué dicen las distintas asociaciones representadas en la mesa del comercio", ha indicado Ribó, quien ha reconocido que la posición de la patronal de grandes superficies Anged y de otros colectivos "no es la misma" y ha añadido: "otra cosa es que después de hablar estemos obligados a cambiar, pero no me gustaría cambiar".
Ribó ha defendido que el domingo es para pasear, para disfrutar con los niños y para que "cada uno puede hacer lo que quiera", por lo que si en ese día hay gente que quiere aplicar "dobles turnos o forzar a sus trabajadores", se coloca a los pequeños comercios locales "en una inferioridad de condiciones" donde "no pueden sobrevivir".
Por su parte, el conseller de Economía, Rafael Climent, ha recordado que la competencia primera sobre esta cuestión la tiene el Ayuntamiento, que debe llegar a un acuerdo y aprobarlo en el pleno, tras lo que su departamento dará "el visto bueno" a lo que el Consistorio decida.
