VALÈNCIA. La subida de los costes de la energía con motivo de la invasión de Ucrania por parte de Rusia ha vuelto a poner sobre la mesa debates latentes y aparentemente cíclicos. Uno de ellos, planteado desde la izquierda, es la creación de compañías públicas de energía que operen en el mercado junto a empresas privadas y puedan influir de alguna manera en los precios de la electricidad. En ese marco, el alcalde de València, Joan Ribó, ya trabaja en una idea de este estilo.
"En un momento de crisis energética estamos pensando en trabajar sobre la idea de alguna empresa relacionada con la energía porque es importante", asegura el primer edil. La iniciativa consistiría en la creación de una empresa dependiente del Ayuntamiento de València pero que no fuera completamente pública, sino que entre los socios también haya capital privado: una compañía mixta de energía municipal.
A juicio del alcalde, hay que hacer "lo posible y lo imposible" por avanzar hacia una futura empresa mixta para la comercialización y distribución de la energía en la ciudad, que a su juicio "podría ser una muy buena solución" para hacer frente no sólo a la crisis de los costes actual, sino para "apostar" de manera decidida por la producción de energías renovables. "Estamos trabajando", explica el primer edil, quien admite que hay "una serie de técnicos" desarrollando la idea "en esta dirección". Sin embargo, todavía quedan muchos detalles por definir pero sí hay unas "coordenadas" fijadas.
Ciertamente, no se trata de una idea nueva. La coalición política que lidera el alcalde, Compromís, incluía entre sus propuestas electorales un proyecto similar, si bien en aquel caso el anuncio hablaba de una empresa pública, que en una primera fase se aplicaría sólo a los edificios públicos. Ahora la idea parece haber madurado un poco y ya abre la puerta a operadores privados.
En este sentido, podría plantearse que Ribó busca seguir la estela de Barcelona, que cuenta con una compañía de este estilo. Sin embargo, aquella es de capital 100% público y no mixta. Por ello, cabría fijarse en otras ciudades como Cádiz, cuya comercializadora eléctrica está participada por el Ayuntamiento pero también por Endesa y Unicaja.
Con todo, el primer edil busca indagar en el sector cooperativo de la energía para poner en marcha esta iniciativa. "Me parece imprescindible sobre todo en estos momentos que todo el sistema energético no caiga en las manos privadas, sino que haya cierta participación pública, pensando también en el sector cooperativo", subraya en ese sentido, para añadir que en València ya hay "experiencias de este tipo", en formato de cooperativa, que pueden resultar "interesantes" de explorar.
Mientras tanto se define la propuesta del todo, el Ayuntamiento de València viene trabajando en los últimos años, por otra parte, en la instalación de placas solares en la ciudad. Así, ha ubicado placas fotovoltaicas en edificios municipales y trabaja en la construcción de la mayor planta solar urbana pública en todo España con el proyecto 'Réquiem In Power', que contempla 7.000 placas solares en cementerios municipales de la ciudad.
Por otra parte, el consistorio ha dado facilidades a la instalación de placas solares en las fincas y edificios privados. Por ejemplo, se aprobaron bonificaciones del 50% en el IBI a los edificios de viviendas que hayan instalado sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico de energía solar, y un 25% para otro tipo de edificios. A lo que se suma la rebaja del 95% en el impuesto para las obras de estas infraestructuras.
Otro de los cambios aprobados por el consistorio es la modificación de la ordenanza municipal de captación solar, para reducir la burocracia en la instalación de estas infraestructuras. Y también se prestan labores de asesoramiento y formación desde la Oficina de la Energía municipal, que el año pasado atendió a 7.000 personas.