VALÈNCIA. El Centre del Carme, sede del Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana (CMCV), ha sido el escenario de un robo que ha perturbado la actividad del contenedor cultural dirigido por José Luis Pérez Pont. Fue el pasado fin de semana cuando el autor del hurto sustrajo uno de los dibujos que formaban parte de la exposición Por la defensa de la cultura, que se inauguró el pasado 20 de noviembre y que, precisamente, cerraba sus puertas este domingo 21 de enero, unas últimas horas de vida en las que se ha perpetuado el robo. Según ha podido saber Cultur Plaza, fue durante la jornada del sábado, dentro del horario de apertura y cuando el espacio cultural celebraba el festival de música Volumens, que la obra fue robada de la sala que hasta ahora acogía la exposición.
Tal y como ha confirmado a este periódico la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, la institución ya ha denunciado los hechos ante la Policía Nacional, un robo que ha provocado un lógico nerviosismo en el seno del Consorci de Museus. Fue este sábado cuando el dibujo fue sustraído de una de las salas del Centre del Carme, día en que el espacio acogía el evento Volumens Day, un festival de música experimental que tuvo lugar entre el mediodía y las 23 horas. Por lo pronto, desde el Consorci de Museus se ha informado a las autoridades competentes del suceso, que derivará en la consecuente investigación.
Comisariada por Edelmir Galdón y Francesc Pérez Moragón, la muestra fue inaugurada el pasado año con la presencia, entre otros, del propio President de la Generalitat, Ximo Puig, o del Secretario Autonómico de Cultura y Deportes, Albert Girona. Organizada por Presidencia de la Generalitat Valenciana y con la colaboración, además del CMCV, del Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) y de la Biblioteca Valenciana, Per la defensa de la cultura se presentaba como una “oportuna reflexión y conmemoración” de los congresos que tuvieron lugar en julio de 1937 en València, entonces capital de la República en plena guerra civil española, y el celebrado en 1987 con el lema ‘València, punto de encuentro’.
Hay que remontarse al año 2015 para situar el último robo que sufrió un museo público valenciano. Se trata del Museu de Belles Arts, de donde se sustrajeron en agosto de ese año más de cuarenta obras, piezas no expuestas al público y “muy menores”, especificaron entonces desde la conselleria de Cultura. Fueron en este caso los propios trabajadores del centro quienes dieron la voz de alarma al percatarse de que se había forzado una de las puertas del Pabellón Benlliure, un anexo a la pinacoteca separado del edificio principal que se utiliza como almacén auxiliar, así como depósito de grandes obras de escultura, especialmente el monumento funerario del torero Joselito el Gallo realizado por Benlliure, y para un pequeño taller de restauración.
Entre las piezas robadas, que sumaban un valor cercano a 1.200 euros, se encontraban tres tallas de madera de 30 centímetros de la escuela de Vergara, un cincuentín de plata de Juan Carlos I de 1995, tres rosarios de madera, un arma de fuego de principios del siglo XX y 37 medallas de latón conmemorativas de fiestas, asociaciones y méritos educativos. Fue durante una rueda de prensa convocada por los responsable autonómicos –entre ellos Girona y la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga- para tratar el suceso que estos responsabilizaron del robo al anterior gobierno por "mala gestión" y dejar al recinto en "situación de vulnerabilidad" durante las obras al anular una cámara de videovigilancia.