La expresidenta asegura que el exgerente de los galenos pagó los 10.200 euros requeridos por la empresa de catering
VALENCIA. La expresidenta del Colegio de Médicos Rosa Fuster, acusada de malversación y apropiación indebida por el presunto desfalco de más de 10.000 euros, aseveró ayer en sede judicial que “firmó el pago de 10.200 euros para la persona encargada de la cafetería, con el visto bueno de la intervención, pero que no tenía potestad para abonar el dinero en mano, ya que un presidente nunca paga una factura”.
Según la declaración y la documentación aportada por Fuster a la que ha tenido acceso Valencia Plaza, ella como presidenta, podía firmar el pago pero en ningún caso tenía la capacidad de darle el dinero al concesionario de la contrata del catering, ya que todas las responsabilidades iban en cascada y ella firmaba, siempre con el visto de intervención, pero no pagaba, hecho que ha podido comprobar este periódico al acceder a las facturas con los ‘vistos’ de intervención y la presidenta.
Este extremo fue ratificado con anterioridad por el exgerente del colegio, Andrés Martínez, quien en el juzgado que instruye la causa declaró que “la presidenta dio el visto al pago pero no lo realizó”. Tal y como aseveró Martínez, fue él quien le pagó al responsable de la cafetería, y le pagó en metálico porque “éste le pidió que así lo hiciera por los embargos que sobre él pesaban”.
Al realizar el pago de ese modo, y más teniendo en cuenta que el pago se realizó el día anterior al cambio de junta directiva, el exgerente no pudo entrar en su despacho para poder recoger el “recibí” en papel que se supone que existe del pago, ya que la nueva dirección del colegio de galenos le prohibió la entrada en el despacho y, por tanto, no ha podido aportarlo al juzgado.
La denuncia por malversación y apropiación indebida contra la anterior directiva es una más dentro del cruce de denuncias entre directivas. A la publicada ayer por este periódico por malversación de fondos, prevaricación y estafa, por la emisión de cinco cheques por valor de casi medio millón de euros de las arcas del Colegio de Médicos en concepto de préstamo a una empresa para la rehabilitación de un edificio en La Rambla de Barcelona, hay que sumar las interpuestas por Fuster y su junta.
De hecho, a día de hoy, la Policía Nacional investiga a los actuales dirigentes del Colegio de Médicos por calumnias e irregularidades dentro de la campaña electoral que les dieron la victoria en las últimas elecciones. Pero además, también hay abierto un asunto dentro de la jurisdicción Contecioso-Administrativa en la que se reclama la “anulación de las elecciones”. Según Fuster, esta última causa está “bastante paralizada por la negativa de la actual directiva a aportar la documentación que desde el juzgado se le requiere”.