VALÈNCIA (EP). El artista Rubén Tortosa inaugura en el Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) de València Vía Líquida, un proyecto en el que invita a los visitantes, a través de un código QR, a dejar sus mensajes para convertirlos posteriormente en "lágrimas" que se deslizan sobre 16 enormes pañuelos de látex "vivos" que cuelgan de la Sala Dormitorio.
De este modo, el agua se forma en la condensación de la pantalla y viaja a través de la red ganando en intensidad, "como si se tratase de una pulsión viva", formando ondas que se expanden y que accionan una nueva interacción, que reproduce sonidos. La exposición combina arte y tecnología y persigue "hacer partícipe" al visitante, que se convierte en "protagonista de la evolución y definición" de la obra.
Así lo han explicado este viernes el director del Consorci de Museus y del Centre del Carme, José Luis Pérez Pont, y el propio Tortosa, comisario y artista de la obra. Este último ha subrayado el carácter "simbólico" e "íntimo" de la muestra, que, a su juicio, constituye "una metáfora de la realidad", y que es la última en la programación del CCCC de este 2022 y que podrá visitarse hasta el 19 de marzo del próximo año.
En la muestra 'Rubén Tortosa. Vía líquida', el agua se forma en la condensación de la pantalla y viaja a través de la red. Al acceder a la sala, el usuario dispone de un código QR mediante el cual puede interactuar con su dispositivo móvil escribiendo un mensaje mediante un breve texto.
Estas palabras, que "viajan virtualmente a través de la red", se materializan en una lágrima que discurre por uno de 16 pañuelos de látex suspendidos en el techo. El número 16 no es casual, puesto que es una cifra escogida en referencia a la profundidad del bit -dígito del sistema de numeración binario que representa la unidad mínima de información-, que se deposita en un recipiente que también contiene agua.
Cada pañuelo está iluminado por dentro con una luz latente. Al recibir el agua, que viene "de las entrañas de la red", gana en intensidad "como si se tratase de una pulsión viva", y cae dentro de un recipiente de zinc. De esta manera, se forman ondas que se expanden y que accionan una nueva interacción, que reproduce sonidos geolocalizados y alojados en páginas web de paisajes sonoros como Escoitar o Audiomapa, desde el Amazonas hasta la India, África u Oceanía, y que se amplifican por toda la sala.
Al final de la visita, los mensajes encapsulados en el agua tendrán "una segunda vida" al caer impresos en pequeños papeles como lluvia de pensamientos, para que cada espectador pueda recogerlos y guardarlos. Estos 'depósitos de memoria' también quedarán recogidos en la propia web de la obra.
Multidisciplinariedad
El comisario y artista de la exposición, Rubén Tortosa, ha señalado que en el transcurrir de la obra, "desde la primera interacción en la pantalla donde nace el agua y discurre, se establece un recorrido, un viaje de cambio de signos, de formatos y de superficies".
"Es una obra muy importante por la multidisciplinariedad de los procesos que se han visto involucrados para poder llevarla a cabo. El trabajo junto a ingenieros informáticos y arquitectos en largas sesiones de trabajo me ha proporcionado una perspectiva muy interesante y enriquecedora, tanto personal como en el desarrollo de mi trabajo creativo", ha expuesto.
En esta línea, ha recalcado que, a su juicio, resulta "fundamental" que los visitantes, al interactuar con la muestra, "se hagan preguntas y se cuestionen la propia obra de arte". Sobre esta premisa, ha reivindicado que los artistas han de "arriesgar" en sus proyectos, como en su caso, para lo que se hace imprescindible "el apoyo de las instituciones", como el Consorci de Museus y el CCCC.
"Otras maneras de hacer arte"
El director del Consorci de Museus y del Centre del Carme, José Luis Pérez Pont, ha destacado el "papel fundamental" de la tecnología en la muestra, en la que las palabras son "motor" y "capaces de activar y condensar emociones" con el agua como elemento "esencial", que "se materializa y toma forma".
En este punto, ha hecho hincapié en la "carga simbólica" de la Sala Dormitori del Centre del Carme, donde está instalada la exposición, que "invita a reflexionar sobre otras maneras de hacer arte" y que aglutina "un trabajo de mucho tiempo", afectado también por las consecuencias de la pandemia.
"Las palabras tienen el poder de dar forma a las ideas, invitarnos a la acción o sacudir nuestras emociones. 'Vía líquida' es una instalación digital a partir de un elemento tan esencial como el agua. Los mensajes de las personas que visiten la muestra se convertirán en agua; después, en ondas, y, finalmente, en palabras, de una forma tan bella como reflexiva", ha expresado.
Por último, ha considerado que no hay "mejor manera de despedir este año que de la mano de un creador como Rubén Tortosa, que ha desarrollado desde València una destacada trayectoria artística vinculada a la tecnología".
Rubén Tortosa
Rubén Tortosa es doctor en Bellas Artes, profesor titular de universidad y subdirector de Investigación y posgrado del Departamento de Dibujo de la Facultad de Bellas Artes de la Universitat Politècnica de València.
Desde 1988 Tortosa comienza a trabajar con tecnologías digitales aplicadas a la creación artística, y desarrolla una actividad investigadora intensa que lo llevó, en la década de los 90, a realizar numerosas exposiciones nacionales, en València, Madrid, Barcelona, Sabadell, Las Palmas de Gran Canaria, Cuenca, Bilbao, e internacionales, en Hannover, Colonia, Nürnberg (Alemania) París (Francia), Inverness (Escocia), Setúbal (Portugal), McMinnville, Raleigh (USA), Osaka (Japón) y Oslo (Noruega).
A partir del 2004 pasa a formar parte como artista de la galería Set Espai d'Art, con la que realiza numerosas exposiciones individuales y colectivas.
Sus líneas de investigación son, por una parte, el registro y la impresión de la imagen digital sobre soportes no convencionales a través de procesos de transferencia, así como el análisis de los datos, para su visualización de la imagen mediante dispositivos de impresión interactivos e instalaciones interactivas.