MADRID (EP). Banco Sabadell está comunicando a lo largo de este jueves a sus empleados la resolución de sus solicitudes de adhesión al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que va a aplicar en su plantilla, de la que finalmente saldrán 1.605 empleados: el número máximo pactado con los sindicatos.
Serán 1.605, y no 1.380 empleados, después de que el banco recibiese cerca de 2.100 solicitudes de adhesión voluntaria. Tal y como adelantó el pasado lunes el consejero delegado de la entidad, César González-Bueno, el 61% de las salidas de empleados son prejubilaciones, es decir, cerca de 980 trabajadores.
Está previsto que las salidas comiencen este mes de diciembre, cuando dejará la entidad un tercio de los empleados, mientras que, con carácter general, el resto saldrán a lo largo del primer trimestre de 2022, según han señalado fuentes sindicales a Europa Press, si bien el plazo de ejecución de las medidas se extenderá hasta el 30 de junio de 2022. Además, en el marco del ERE, la entidad ya ha cerrado 320 oficinas y ha convertido 176 en cajas avanzadas, donde continúan funcionando los cajeros y servicios básicos.
Banco Sabadell estima que el proceso de ajuste más otras medidas adicionales le permitirá unos ahorros mínimos de 130 millones, del 85% en 2022 y del 100% a partir de 2023, mientras que los costes de reestructuración ascienden a 331 millones entre el ERE (269 millones), las medidas adicionales de eficiencia (32 millones) y los cierres de oficinas (30 millones).
La entidad ya registró en el tercer trimestre de 2021 tanto la provisión por los costes de reestructuración como las plusvalías. El consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, aseguró a finales de octubre que la entidad no tiene intención de realizar otro ERE: "No está en el horizonte".