VALÈNCIA. Escena Miñarique, compañía cántabra ganadora de varios premios Max de teatro, desembarcará el próximo domingo 12 de noviembre en la Sala L’Horta con una pieza de danza-teatro para niños y niñas a partir de los dos años donde las fronteras entre la realidad y la fantasía se desdibujan. En tÁ, "nos adentramos en un bosque donde lo irreal se integra como un elemento más de la vida cotidiana y la escenografía se convierte en un personaje más de la obra", cuenta la sala en una nota remitida.
Las protagonistas de la obra, interpretadas por la actriz Ivana Heredia y la bailarina Maria Canel, son dos personas peculiares, divertidos y sensibles que entablan una relación de amistad a través de juegos como el escondite o la imitación, con el objetivo de que el público dé rienda suelta a emociones básicas como la alegría, la tristeza, la risa o el miedo.
tÁ aplica por primera vez al teatro de primera infancia técnicas innovadoras de danza como la técnica Laban, método desarrollado por el coreógrafo y teórico del movimiento Rudolf Laban a principios de siglo XX que se aplican a las artes escénicas para enriquecer la actuación, la dirección y la comprensión del movimiento.
Según Lorena Fernández, directora y coreógrafa de la obra, “el objetivo es que el público pueda transitar por las mismas emociones que los personajes de la obra. Hemos trabajado con emociones más que con conceptos, emociones que se muestran de forma más patente en los niños”. Es la primera vez que la autora, con una amplia experiencia anterior como bailarina en el Royal Ballet y el English National Ballet de Inglaterra, se lanza a la concepción de una obra para la primera infancia. “Me impulsó sobre todo la experiencia de ser madre. Tengo tres hijos pequeños y mucho de lo que aparece en la obra está sacado del día a día con mis niños y observar cómo negocian emocionalmente entre ellos. Aprender de los niños sin olvidarnos tampoco del público adulto, porque al fin y al cabo ellos no son más que el reflejo de sus padres”.
En esta obra, que rompe con la linealidad temporal del relato y que tiende a desarrollar ampliamente la metaficción, los personajes no muestran extrañeza ante fenómenos insólitos. Es un espectáculo de teatro gestual y danza sin palabras, que utiliza en su lugar onomatopeyas, interjecciones y el pre-lenguaje infantil, y en la que no interesa tanto transmitir conceptos como emociones. Al final del espectáculo se invitará a los más pequeños a adentrarse en el interior del bosque de la mano de actriz y bailarina de una forma muy especial… ¡bailando!
tÀ tiene una duración de 30 minutos y se representará en la Sala L’Horta el domingo 12 de noviembre en dos pases; a las 11:00 y a las 12:30.