VALÈNCIA. (EP) El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha convocado este viernes a las 9.00 horas a la Comisión Ejecutiva Federal (CEF) del partido, en el que se será su último encuentro antes de nombrar una nueva dirección en el 40º Congreso Federal que la formación política celebra en València entre el 15 y el 17 de octubre, según informan a Europa Press fuentes socialistas.
La reunión de la Ejecutiva será este viernes, en lugar del lunes, como es lo habitual, debido al puente del 12 de octubre de la próxima semana, según informan las fuentes consultadas. Dado que el martes es festivo, Sánchez ha convocado para el lunes el Consejo de Ministros ordinario.
De este modo, el equipo que ha acompañado a Sánchez al frente del PSOE durante los últimos cuatro años tendrá ocasión de verse una vez más en Ferraz, despedirse y hacer balance de su labor, antes de concluir su mandado en el Congreso Federal, en el que debe presentar su informe de gestión.
Es más, para muchos de los actuales integrantes de la Ejecutiva la reunión de este viernes será su despedida de la dirección del PSOE, ya que el presidente planea acometer una profunda renovación de su equipo de dirección en el partido, en línea con la intensa crisis de gobierno que ya realizó en Moncloa en julio.
Sánchez busca rodearse ahora de un equipo más reducido y operativo, según explican dirigentes socialistas consultados por Europa Press. A diferencia del anterior congreso de 2017, cuando Sánchez logró hacerse otra vez con el control del PSOE tras haber sido descabalgado en 2016 por negarse a permitir la investidura de Mariano Rajoy, el líder socialista llega a la cita de València libre de ataduras y favores que devolver.
También se prevé que Sánchez prime en su Ejecutiva a dirigentes jóvenes, procedentes del municipalismo, y que haya una gran presencia de mujeres --fuentes consultadas por Europa Press señalan que podrían llegar a ser el 60% de los miembros del nuevo equipo del secretario general--.
Es decir, las mismas ideas que ya guiaron al presidente en su remodelación del gobierno de julio, que supuso la salida, entre otros, de algunos pesos pesados como la entonces vicepresidenta primera Carmen Calvo, el que fuera ministro de Transportes y también secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, o el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo.
Lo único que está claro por el momento es que la actual vicesecretaria general, Adriana Lastra, seguirá en su cargo como 'número dos' del partido, sobre todo después de haber abandonado la portavocía en el Congreso para centrarse en Ferraz y en preparar las próximas citas electorales.
También se da por hecho la continuidad de Santos Cerdán al frente de la secretaría de Organización, un cargo que asumió en julio tras la salida Ábalos del partido, cuando dejó de ser ministro.
Algunos de los dirigentes que se asume que no repetirán ya han dado un paso atrás y han presentado su renuncia, como es el caso del alcalde de Valladolid, Óscar Puente, que seguía ostentando sobre el papel la portavocía del partido pero que llevaba años sin ofrecer una rueda de prensa en Ferraz. También ha presentado su dimisión el diputado por San Sebastián Odón Elorza.
El congreso de València supone así la culminación de la estrategia de renovación del partido que Sánchez ya inició con la mencionada crisis de gobierno, en la que le devolvió al PSOE el protagonismo en Moncloa. El ejemplo más claro fue la salida de su entonces jefe de gabinete Iván Redondo, y la llegada a este cargo de Óscar López, quien fuera secretario de Organización del partido bajo el liderazgo de Alfredo Pérez Rubalcaba.