VALÈNCIA. La enmienda presentada desde el entorno del líder del PSPV y presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para permitir la posibilidad de que cada federación socialista pueda elegir su manera de organizarse -si en provincias o en comarcas- fue taponada en la ponencia política por el grueso del 'sanchismo' con los seguidores del nuevo secretario de Organización, José Luis Ábalos, al frente.
Así, ya de entrada, el responsable de la ponencia José Félix Tenazos rechazó la enmienda al párrafo referido sobre este asunto en la ponencia marco. El texto original rezaba lo siguiente: "Disposición adicional octava. En aquellas Federaciones donde existan
Agrupaciones Comarcales, los Congresos Nacionales o regionales podrán acordar la creación de órganos de coordinación política comarcal. La composición y elección de dichas estructuras quedará establecida en los correspondientes Reglamentos".
Sobre esto, la enmienda presentada por el ex diputado nacional Herick Campos, afín a Puig, solicitaba la sustitución del texto por lo siguiente: "Las federaciones decidirán en sus congresos regionales el tipo de estructura del partido en su ámbito de actuación (comarcal o provincial)". Una enmienda que fue rechazada por el ponente pero que cuyo debate se solicitó desde el sector de Puig.
Así, el diputado autonómico y exalcalde de Cocentaina Rafael Briet fue el encargado de defender la enmienda -Herick Campos no era delegado- con una línea argumental que indicaba que la propuesta resultaba "lógica" dentro de la óptica federalista. En esta línea, el dirigente subrayó que se respetaba la autonomía de cualquier federación a organizarse por provincias y que a su juicio siempre debería votarse a favor desde el PSPV pero que, de la misma manera, se solicitaba que se apoyara la capacidad de los socialistas valencianos para poder organizarse en comarcas, tal y como ha ocurrido históricamente excepto en esta última etapa, si así lo decidían.
No obstante, la argumentación no tuvo éxito en la comisión, dominada por los afines a Pedro Sánchez y donde también había un nutrido de delegados próximos a Ábalos. Sobre este particular, fuentes cercanas al secretario de Organización in pectore puntualizaron que el deseo de este cambio por parte de Puig se debe a su "falta de control de las estructuras provinciales". La iniciativa no reunió el 20% mínimo para alcanzar la siguiente fase en el plenario del cónclave. Una decisión que los proponentes calificaron como "un paso atrás del 'nuevo PSOE' en el federalismo".
Fuentes del partido señalaron que a favor de la enmienda votaron alcaldes como Jesús Ros (Torrent), Fran López (Rafelbunyol), Eva Sanz (Benetússer) o Ramon Marí (Albal). En cambio, algunos de los que la rechazaron fueron dirigentes próximos a Ábalos como la concejal de València, Maite Girau, la alcaldesa de Anna, Pilar Sarrión, Vicent Vercher o Martín Navarro.