VALÈNCIA (EP). La dirección del departamento de salud Arnau Vilanova-Llíria, ante la situación de bajas laborales de los profesionales ocasionadas por las agresiones y amenazas recibidas en los últimos días, se ha visto obligada a paralizar la actividad del Centro de Salud La Coma, en Paterna.
Actualmente, el centro cuenta con dos personas de seguridad y, paralelamente, se ha reforzado la vigilancia por parte de la Policía Local, según han informado fuentes de la Conselleria de Sanidad.
Varios trabajadores del centro han solicitado la baja tras las últimas agresiones, por lo que se ha procedido a ofertar estas vacantes a través de la bolsa de trabajo. De momento, solo se atiende la Unidad de Conductas Adictivas y el área de Salud Mental.
La atención urgente para los ciudadanos adscritos a este centro se ofrece ahora en otros consultorios cercanos como La Canyada, La Lloma Larga, El Clot (que además cuenta con Punto de Atención Continuada), Campamento y Santa Rita. La previsión es que La Coma pueda retomar la actividad "de forma progresiva" a partir de la próxima semana, han informado las mismas fuentes.
Ante esta situación, el Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Valencia ha expresado su más "enérgica condena" respecto a una agresión que en la jornada de ayer sufrió un médico del ambulatorio "tras ser atacado por un paciente", y le ha transmitido su solidaridad y respaldo.
Desde esta institución han avisado de que no cesarán en el empeño de denunciar este tipo de incidentes, "que menoscaban la salud física y mental de los médicos, y que suponen una lacra para nuestra sociedad", ha indicado la entidad en un comunicado.
El Colegio registró el pasado año 25 agresiones en la provincia de Valencia, la segunda cifra más alta en la última década. Una cifra "insostenible" que, además, no alcanza a la realidad, "pues muchas agresiones, ataques o amenazas no se denuncian por miedo", ha señalado.
Por ello, desde la entidad instan a todos los médicos a que denuncien. "Tienen a su total disposición los Servicios Jurídicos de la corporación para ofrecerles cobertura jurídica integral y apoyarles ante cualquier agresión sufrida, así como la Oficina de Atención Social para prestar atención psicológica en el caso que fuera requerido". Para facilitar estos trámites, la corporación colegial dispone de una plataforma pionera en su página web donde se puede denunciar directamente la agresión sufrida.
Por su parte, el Consejo de Enfermería de la Comunitat Valenciana (Cecova) ha condenado el ataque "que se suma a todo un listado de agresiones que ya ha sufrido el personal sanitario del centro de salud durante los últimos años". El presidente de la entidad, Juan José Tirado, ha solicitado en un comunicado a la administración que mejore los protocolos de seguridad para evitar este tipo de hechos.
"La solución no pasa por cerrar ambulatorios o centros de salud, ya que perjudica al resto de usuarios. La solución pasa por establecer sistemas de seguridad en los puntos más conflictivos que eviten estas abominables acciones contra las enfermeras, los médicos y el resto de personal sanitario y administrativo que cubre la atención y la asistencia sanitaria a la población", ha dicho.
Además, Juan José Tirado ha subrayado que los profesionales de Enfermería son, en el conjunto de la Comunitat Valenciana, "los que registran más actos violentos verbales y físicos por parte de los pacientes y de sus familiares o acompañantes".
Ante ello, ha hecho un llamamiento para que se tenga en cuenta que el personal sanitario "está realizando un importante esfuerzo para proteger la salud de la población arriesgando su seguridad personal, ante lo cual se debe tener hacia ellas la consideración que merece su entrega y dedicación en todo momento".
Desde CCOO han lamentado esta situación y han apuntado que las bajas laborales en el Centro de Salud de La Coma responden también, en gran parte, "a las amenazas que reciben" los médicos "diariamente", "incluso en alguna ocasión con armas", ha apostillado.
"Las personas trabajadoras de este centro sanitario exigen trabajar con seguridad y lamentan que la agresividad de unas personas esté perjudicando a la población de esta zona que necesita atención sanitaria en su centro más próximo. Hoy el ambulatorio está cerrado y los pacientes se derivan a otros de la zona básica de salud", ha aseverado.
Así, CCOO ha exigido a la Administración que se tomen medidas para que cese "de una vez por todas" la violencia que sufre el personal "y que está perjudicando su salud, tanto física como emocional".
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) también ha exigido a la Conselleria de Sanidad que adopte medidas urgentes para mantener el servicio en el consultorio de La Coma. El sindicato considera la situación "insostenible" y ha pedido la convocatoria inmediata del Comité de Seguridad y Salud Laboral.
El consultorio, adscrito al departamento de salud Arnau-Llíria, tiene una cartera de servicios que incluye Pediatría, Medicina de Familia, Enfermería o Matrona. El sindicato ha lamentado que los profesionales llevan a cabo su labor en un contexto "insoportable" debido a las "continuas amenazas, intimidaciones e insultos".
CSIF considera que la solución "no consiste en derivar a los pacientes a otros centros de salud de Paterna, algunos de ellos ya saturados, sino en adoptar medidas urgentes que garanticen la seguridad de los profesionales y que permitan llevar a cabo la atención adecuada a la ciudadanía", ha dicho.