Alberto de Rosa, consejero delegado de Ribera Salud. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. Parecía que las relaciones entre la Conselleria de Sanidad y Ribera Salud, empresa gestora del departamento de La Ribera hasta marzo de 2018, se habían destensado tras la reversión. Sin embargo, la ex consellera, Carmen Montón, dejó alguna que otra piedra por el camino que todavía perdura tras su marcha al ministerio.
En la recepción del acta de bienes y servicios entregados por la empresa y del estado de conservación se incluía una sorpresa: un informe en el que Sanidad reclama 15 millones de euros por desperfectos en las instalaciones de los centros ambulatorios y del hospital del departamento de La Ribera.
Fuentes conocedoras del documento aseguran que es un informe preliminar que se está debatiendo. Mientras, desde la Conselleria de Sanidad señalan que se encuentra en fase de alegaciones. En todo caso, el documento se está debatiendo con el nuevo equipo para ver si tiene validez jurídica o no.
Una de las razones se debe a si el pliego recoge o no la obligación de pagar esos pormenores, ya que fuentes conocedoras del informe apuntan a que las cuestiones recogidas van desde muebles a aparatos de aire acondicionado rotos. Sin embargo, desde la empresa alegan que tras haber acometido el compromiso de inversión de 140 millones de euros requerido por el pliego y haber devuelto las instalaciones en estado de funcionamiento ya han cumplido su parte del contrato.
Además, señalan que han devuelto los inmuebles incluso con más tecnología de la que se les requería, como dos resonancias en vez de una. Tras la salida de Ribera Salud, Sanidad ya anunció un plan de inversiones de urgencia para mejorar distintos aspectos del departamento con una inversión de 5,7 millones de euros en 2018 y 2,1 millones en 2019, tanto en el hospital como en Atención Primaria.
También señalaron que se destinarían 450.000 euros para la adquisición de mobiliarios y arreglo de infraestructuras en Atención Primaria, además de la renovación del equipamiento de radiología, "obsoleto en algunos centros de salud", según calificaron desde Sanidad en el momento de la vuelta a lo público del departamento.
Cabe destacar que desde que Ana Barceló llegara al departamento de Sanidad han sido pocas las discrepancias entre Ribera Salud y la conselleria que se han hecho públicas. Las dos partes han mantenido un perfil bajo respecto al tema, aunque este martes volvía a tensarse la situación al reivindicar la compañía que los hospitales de Torrevieja y Vinalopó -gestionados por Ribera Salud- tuvieron menos demora en las listas de espera que en los públicos.
