La ministra de Sanidad, Carolina Darias. Foto: J. HELLÍN/POOLVALÈNCIA. El Ministerio de Sanidad tomó este miércoles en solitario una decisión política al margen de la Estrategia de Vacunación y sin el respaldo de la Comisión de Salud Pública ni del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud: se vacunará a los integrantes de la Selección Española de fútbol.
La medida llega después de que el Consejo Interterritorial, formado por el Ministerio y las Comunidades Autónomas, se haya negado durante meses a incluir en el calendario de vacunación a los ciudadanos con patologías crónicas que, según han probado numerosos estudios, corren más peligro que la media de sufrir graves complicaciones y de morir que el resto.
No fue hasta el 30 de marzo que se incluyó en el calendario a los enfermos de una serie de patologías consideradas "de muy alto riesgo", tales como transplantados, pacientes con diálisis, enfermos de algunos cánceres. Posteriormente, y tras muchas protestas se añadió a los enfermos de más de 40 años con Síndrome de Down y, ya en mayo, a las personas con enfermedad mental aguda y a los que padecen fibrosis quística, a los que varias CCAA había decidido vacunar saltándose la Estrategia.
Sin embargo, cientos de miles de personas afectadas por otras patologías continúan esperando que les toque el turno por edad, ya que Sanidad se resiste a darles prioridad a pesar de que así lo pidió en un informe la Federación de Asociaciones Científico Medicas Españolas (Facme) en un informe el pasado 29 de marzo. Entre las patologías están los pacientes en tratamiento inmunosupresor, con insuficiencia cardiaca, con dificultad ventilatoria de causa neurológica (incluyendo miastenia gravis, enfermedades neuromusculares o esclerosis múltiple avanzada), diabéticos insulinodependientes, personas con insuficiencia suprarrenal crónica, con cirrosis hepática y con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) grave.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, siempre se ha escudado en decisiones científicas y éticas para justificar la racanería de su departamento a la hora de hacer excepciones en el orden de vacunación basado en la edad. Este miércoles, tuvo que admitir que la decisión de vacunar a los futbolistas de la Selección era del Gobierno, sin el respaldo de las CCAA ni de ningún órgano científico. Tampoco del Comité de Bioética, al que no se le ha preguntado.
Según argumentó, se trata de "una decisión tremendamente importante, una decisión necesaria" y basada en "los mismos criterios éticos" que se han aplicado con el equipo olímpico que acudirá a los Juegos de Tokio, que también se decidió vacunar al margen de cualquier criterio ético-científico. Cuestionada sobre la tremenda importancia a la que había hecho referencia, se reafirmó con argumentos como que la Selección ha sido campeona del mundo y de la Eurocopa y "representa a España".
La decisión de Darias llega, además, tarde para los jugadores de la Selección, que han sufrido dos bajas por covid esta semana -Busquets y Llorente- y entrenan de forma individual a la espera de que el paso de los días confirme que no hay más contagiados. Su primer partido de la Eurocopa se juega el lunes, día en el que la primera dosis de la vacuna aún no habrá hecho efecto.
A pesar de que la ministra aseguró que la decisión se ha tomado "lo más rápido posible", lo cierto es que perdió dos días buscando un respaldo que no consiguió. El martes, el Consejo de Salud Pública rehusó respaldar la decisión argumentando que no era su cometido -a pesar de que sí ha intervenido en todas las decisiones plasmadas en la Estrategia de Vacunación-, y el miércoles, trató de conseguir el visto bueno del Consejo Interterritorial pero las CCAA también se desmarcaron, por lo que el Ministerio decidió "informar" a este órgano en lugar de pedir que se votase.
