CASTELLÓ. La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, confirmó este jueves los peores temores del azulejo: el Gobierno ya tiene clara su propuesta para topar el precio del gas... y esta solo prevé poner límite cuando se utilice este combustible para producir electricidad.
Según señaló este jueves en una visita a la comarca leonesa del Bierzo, Ribera ha destacado que el Gobierno considera "imprescindible intervenir" el precio del gas para paliar el coste de la luz, que está "absolutamente fuera de cualquier patrón ordinario o previsible" desde el verano de 2021, cuando comenzaron las tensiones por el abastecimiento de gas de Rusia hacia Europa.
Unas palabras que duelen en el sector azulejero, que ve cómo desde esa fecha (e incluso antes) se han disparado sus costes productivos debido precisamente a este incremento desmesurado del precio del gas. Incluso un tope mayor que el fijado para producir electricidad -de 30 euros el megavatio hora, según dijo Ribera-, la industria castellonense se podría dar por satisfecha.
Así, aunque es cierto que desde el primer momento el debate sobre los topes al precio del gas estaba centrado en la electricidad, y pese a que todavía falta la aprobación de Bruselas -que puede estar "en tres o cuatro semanas", dijo Ribera-, con las palabras de la ministra el sector cerámico ve cómo se desvanecen las pocas esperanzas que tenía de lograr un límite que hiciera viable la actividad en sus factorías. De hecho, este miércoles, antes de reunirse con la ministra de Industria, Reyes Maroto, las patronales Ascer y Anffecc insistieron en la necesidad de establecer ese tope, como también pidieron otras asociaciones estatales.
El mismo presidente de la Generalitat, Ximo Puig, así lo ha pedido en reiteradas ocasiones, pero sus palabras no han tenido efecto. En sus demandas, las patronales castellonenses insisten últimamente en la necesidad de eliminar los peajes gubernamentales al gas. Habrá que ver si se actúa en este sentido.