MADRID. Buenas noticias las que ha tenido esta semana la longeva compañía de telecomunicaciones española después de la decisión del Tribunal Económico-Administrativo (TEAC) de devolver más de 700 millones a la teleoperadora, por una reclamación presentada contra una sanción en 2015 por desacuerdo en las bases imponibles negativas.
Esta inyección de capital es muy probable que sea utilizada para reducir su propia deuda, la cual rondaba el pasado septiembre los 42.600 millones de euros, casi un 10% menos si lo comparamos con el mismo dato de un año atrás.
Es importante observar como después de dicha reducción de deuda la acción de Telefónica finalizó su tendencia bajista que había iniciado un año y medio atrás, en febrero de 2017. Desde septiembre de 2018 encontramos como la compañía se encuentra en una consolidación comprendida entre los niveles de los 7,20 euros por la parte inferior y los 7,90 euros por la parte superior.
En el corto y medio plazo, podemos plantear un escenario alcista una vez que haya terminado dicha consolidación y comience nuevamente una recuperación alcista en el activo, es decir, plantearíamos una posición de compra si se rompe esa barrera de los 7,90 euros aunque habría que estar atento a la barrera psicológica de los 8 euros, que en un primer momento no debería presentar ninguna dificultad para que continuara al alza.
Dicha consolidación con carácter alcista podría estar en peligro si Telefónica pierdd el nivel de los 7 euros; un escenario que no creemos que pueda ser probable después de las buenas noticias que ha recibido la 'teleco'.
Borja Matilla es analista de Naga Brokers