Bruch cree que les ayudará en sus dificultades económicas y apuesta por solucionar los problemas técnicos y simplificar la organización
VALÈNCIA (EP). Siemens Gamesa ha aprobado este miércoles en una Junta general extraordinaria de accionistas, celebrada en Bilbao, con un 98,43% de los votos de los accionistas presentes su exclusión definitiva de bolsa tras la oferta pública de adquisición (OPA) de Siemens Energy, después de 22 años de cotización.
Siemens Gamesa ha presentado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la solicitud de exclusión de negociación de las acciones representativas de la totalidad de su capital social de las Bolsas de Valores de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia.
Está previsto que la orden sostenida de compra de acciones de la sociedad formulada por Siemens Energy, que comenzó el 23 de diciembre, finalice el próximo 7 de febrero de 2023, a cierre de mercado, habiendo solicitado a la CNMV la suspensión de la negociación de las acciones de la sociedad desde dicho momento hasta la exclusión definitiva de negociación.
La Junta de Accionistas de la compañía, con sede en Vizcaya, se ha celebrado en Bizkaia Aretoa e incluía, entre otros puntos, la exclusión de negociación de las acciones representativas de la totalidad del capital social de Siemens Gamesa de las Bolsas de Valores de Madrid, Barcelona, Bilbao y València, que finalmente ha salido adelante.
Esta decisión se produce tras 22 años de cotización y después de que Siemens Energy, una vez liquidada la OPA lanzada, elevara al 92,72% su participación total en Siemens Gamesa Renewable Energy (SGRE), después de concluir el periodo de aceptación de la oferta pública voluntaria de adquisición en efectivo, con una tasa de aceptación del 77,88%. Además de poner fin a la cotización, en la Junta también se ha dado luz verde a una modificación de los estatus sociales de la empresa para adecuarlos a la normativa aplicable a una empresa no cotizada.
Como parte de esta modificación de estatus, el consejo de administración de la empresa pasa de 10 a tres miembros. En concreto, se mantendrán el presidente, Christian Bruch, el consejero delegado, Jochen Eickholt, y el consejero no ejecutivo dominical, Anton Steiger. Las reelecciones como consejeros de Bruch y Steiger, aprobadas en la Junta, serán por el plazo de cuatro años. El resto de consejeros presentaron en diciembre su dimisión, que será efectiva una vez las acciones de la compañía dejen de cotizar.
En el transcurso de la Junta, el presidente de la empresa, Christian Bruch, ha iniciado su intervención subrayando que "sin energía eólica, no será factible la transición energética" y ha defendido que el paso de un sistema energético mundial basado en combustibles fósiles a uno más sostenible "solo será posible con una industria eólica sólida y rentable". "En otras palabras: el potencial de éxito de Siemens Gamesa a medio y largo plazo es enorme, pero para recoger esos frutos tenemos que actuar ahora", ha asegurado.
Sin embargo, ha reconocido que los resultados financieros de los últimos años "no han sido satisfactorios" y ha advertido de que, "si esta tendencia se mantiene, el futuro de uno de los negocios más importantes está en juego". Precisamente, hace unos días la empresa informó de que la cuenta de resultados del primer trimestre de su año fiscal incluirá un impacto de 472 millones en el resultado neto de explotación (Ebit), debido a que han detectado más fallos en su flota instalada.
El presidente de Siemens Gamesa ha manifestado que el contexto macroeconómico ha sido "complicado" porque 2022 ha vuelto a ser "un año duro, en el que la pandemia ha seguido restringiendo gravemente el comercio mundial".
Además, ha manifestado que los elevados precios de las materias primas y el transporte, la creciente inflación y la guerra en Ucrania han impactado "de forma drástica" en los mercados globales de la energía. "Y sí, el sector eólico es ahora de máxima importancia para la independencia energética. Sin embargo, las condiciones necesarias para que puedan alcanzarse los ambiciosos objetivos de instalaciones eólicas todavía no se han establecido", ha apuntado.
Bruch ha reconocido que parte de los problemas de Siemens Gamesa han sido "internos". A su juicio, la integración entre Siemens y Gamesa "se quedó corta, con una estructura demasiado compleja que no se ha optimizado desde 2017", y a ello se han unido "las complicaciones derivadas del lanzamiento al mercado de la nueva plataforma 'onshore' 5.X.".
El presidente de la compañía ha señalado que "un primer paso sumamente importante" fue la presentación del programa Mistral, que está adaptando a la compañía "para responder al elevado volumen que se espera en los próximos años". "Mistral y su nuevo modelo operativo están diseñados para encaminar a Siemens Gamesa hacia un crecimiento sostenible y rentable", ha añadido.
Según ha sostenido, a corto plazo el objetivo de Mistral es resolver los problemas técnicos que afectan a la plataforma onshore 5.X. y, a medio plazo, "se va a simplificar la organización". "En el negocio de eólica terrestre esto implica ajustar la cartera de productos. Mientras, en el negocio de eólica marina, la prioridad es mantener el liderazgo de Siemens Gamesa en el mercado", ha dicho.
A largo plazo, según ha detallado, el plan Mistral apuesta por la implementación de una estrategia de plataformas, "que permitirá estandarizar componentes y módulos en toda la cartera, así como facilitar la escalabilidad de los productos", con el objetivo de "reducir los costes y hacer que el negocio eólico sea competitivo".
Ha añadido que Siemens Energy y Siemens Gamesa comparten la misma misión de acelerar la transición energética y cree que la exclusión de negociación de las acciones permitirá mejorar la "coordinación" entre ambas empresas, lo que además "proporcionará a Siemens Gamesa un mayor apoyo para resolver sus dificultades económicas".
Por ello, cree que, en lo sucesivo, "cabe esperar sinergias de ingresos y un acceso a la financiación más fácil para Siemens Gamesa". "Además, podremos aprender del éxito de la reestructuración de Siemens Energy Gas & Power, especialmente relevante para las áreas de producción, cadena de suministro, proyectos y ventas. Ya se han dado los primeros pasos en dicha colaboración, que se han centrado en la simplificación de los procesos y en el establecimiento de estructuras de gobierno más eficientes", ha señalado Bruch, que ha citado como ejemplo el uso de soluciones tecnológicas conjuntas o la creación de un departamento de compras común, que contribuirán "a un rápido ahorro de costes".
El presidente de Siemens Gamesa ha aseverado que, a medio plazo, el objetivo es generar "retornos atractivos" para el accionista y se ha mostrado convencido de que, una vez que las dificultades económicas "se hayan resuelto", el futuro de Siemens Gamesa es "prometedor, al igual que el de la energía eólica en su conjunto".
En este sentido, ha apuntado que, según el Informe sobre las Energías Renovables de 2022 elaborado por la Agencia Internacional de la Energía, las renovables experimentarán "un crecimiento sin precedentes hasta el año 2027".
En concreto, el informe predice que el mundo tendrá que aportar tanta energía renovable en los próximos cinco años como lo hizo en los últimos 20, lo que suponen "buenas noticias", al igual que también lo es que "la capacidad de generación eólica mundial probablemente llegará casi a duplicarse hasta 2027".
"Por eso es tan importante que podamos devolver al negocio eólico a la senda correcta para alcanzar el éxito, ya que solo así podremos beneficiarnos de este extraordinario crecimiento del mercado.
La exclusión de negociación de Siemens Gamesa es un hito de importancia crucial. El negocio de la energía eólica tiene un futuro muy prometedor. La transición energética es el mayor motor de crecimiento desde la Revolución Industrial y Siemens Gamesa puede estar perfectamente posicionada para recoger los frutos de este crecimiento", ha insistido.