VALÈNCIA. El nuevo centro de ingeniería de Siemens Mobility, compañía de soluciones de transporte de la multinacional Siemens, arranca su actividad en València con varios proyectos enfocados al desarrollo de soluciones para una movilidad sostenible, principalmente en el sector ferroviario. Esta nueva delegación de ll grupo alemán cuenta en solo un mes con un equipo de 17 personas y grandes retos por delante tanto a nivel nacional como internacional. Y algunos de sus primeros trabajos pasan por la reseñalización de la red ferroviaria de Taiwán o la automatización de una línea de metro en México.
"Desde este centro se va a trabajar para todo el mundo", destaca el director de Ingeniería de la firma, Fernando Romojaro. La sede central de Siemens Mobility en España se encuentra en la localidad madrileña de Tres Cantos y, por el momento, la idea es que en una primera etapa las instalaciones valencianas sean "una extensión" a nivel proyectos para luego "rodar sola". Las principales líneas de negocio de Siemens Mobility son material rodante, señalización y electrificación de ferrocarriles, sistemas llave en mano y sistemas de tráfico inteligente.
"Somos una empresa del grupo Siemens de 1.500 personas que se encarga de proyectos en movilidad, principalmente para el sector ferroviario. En España, nuestros proyectos van enfocados al desarrollo de sistemas de señalización, es decir, a proteger los trenes y moverlos de forma segura y eficiente para optimizar la operación", explica Romojaro. Y ese cometido será el que lleven a cabo en su nuevo centro en València.
Su aterrizaje en el 'cap i casal' ha sido una decisión estratégica ante las oportunidades de crecimiento que han detectado y ha estado impulsada desde la oficina de Invest in València, promovida por el Ayuntamiento de València y la Cámara de Comercio de Valencia para captar empresas que quieran instalarse en la ciudad. "Estábamos buscando un 'punch' innovador y en València hemos visto que se está generando un ecosistema de movilidad del cual nos podemos aprovechar y también participar. Para nosotros la ciudad es una apuesta fuerte", remarca el directivo de la compañía.
Fue precisamente el ambiente emprendedor de la ciudad uno de los motivos que llevó a la compañía a decantarse por València. "Nos motivó el ecosistema innovador de la Marina, en donde ya existen empresas de movilidad que se están empezando a desarrollar", detalla. Pero también pesó la capacidad y flexibilidad para acceder al talento valenciano. "La Universidad Politècnica de València (UPV) es una joya que, además, facilita la entrada para reclutar talento y participar con ellos para dar a conocer lo que estamos haciendo. La unión que hay entre las universidades y la empresa privada en València es mucho más accesible y sencilla. Por tanto, vimos que era un buen sitio para empezar a crecer", asegura.
De hecho, el responsable de Ingeniería en Siemens Mobility admite que ya están trabajando con la UPV para establecer convenios e iniciar una colaboración. Eso sí, por el momento, no están teniendo problemas para contratar perfiles profesionales. Así, empezaron el proceso de selección en verano y en solo un mes tienen ya a 17 personas en plantilla que van desde químicos, matemáticos, ingenieros o físicos. También apuestan por potenciar en la organización el papel de la mujer, ya que son ellas las que más utilizan el transporte público.
No obstante, su objetivo es aún más ambicioso: alcanzar en un año las 150 personas para doblarla en dos o tres años y que València se erija como punta de lanza en el desarrollo de soluciones tecnológicas en materia de movilidad. "No solo queremos crecer de forma orgánica, sino también con alianzas con otras empresas que nos prestan otro tipo de servicios de ingeniería". De cara a finales de año, tenían previsto llegar a los 30 empleados en València, pero asegura que al ritmo que van se acercarán a los 60.
Y, ¿qué tipo de proyectos se van a desarrollar? Romojaro explica que la compañía lleva años desarrollando iniciativas tanto a nivel nacional, con clientes como Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), como para el mercado exterior. "Estamos con proyectos de automatización en países como Singapur, pero tenemos presencia en Turquía, Egipto, Australia o Taiwán, en donde estamos con la reseñalización de todo el país. En Sudamérica también contamos con varios contratos en Brasil, Colombia o México, por lo que desde València se va a trabajar para todo el mundo", remarca. La compañía destina anualmente 34 millones a inversión en I+D+i
En concreto, algunos de esos pedidos pasan por el montaje de un sistema para la automatización de la Línea 1 del metro en Ciudad de México. "Al final lo que vamos a hacer es cambiar la vida de las personas en la ciudad porque los trenes van a ir más fluidos, con mayor frecuencia, mayor puntualidad y serán mucho más seguros", destaca.
También, trabajan en la construcción de una nueva red ferroviaria de alta velocidad y mercancías de 2.000 km en Egipto y la reseñalización de 68 estaciones de toda la red ferroviaria de Taiwn, lo que supone la eliminación de los sistemas antiguos e introducir otros más modernos que mejoran las líneas y la capacidad que tiene el operador de mover trenes.
Otro de sus grandes hitos es la instalación de un sistema de señalización en los 24 km de la línea de metro elevada Jurong Region Line de Singapur. Con esta infraestructura inteligente se proporcionará una mayor disponibilidad, mejora de las operaciones e incremento de la experiencia del viajero. Unos proyectos en los que participará su nuevo equipo valenciano.
"Ahora mismo tenemos una tecnología disponible que puede incrementar la capacidad y mejorar la eficiencia de las líneas. Las automatizaciones permiten minimizar la la intervención humana y mejorar la seguridad. Por ejemplo, en Singapur solo actúa el operario si algo falla, pero los convoyes se despiertan y se van a dormir casi solos. Estos procesos permiten optimizar toda la operación e incluso ser más eficientes en el uso de la energía", señala el directivo.
A nivel nacional, explica que las únicas líneas de metro totalmente automatizadas son la 9 y la 10 de Barcelona, aunque considera que en seguridad ferroviaria las infraestructuras nacionales están "bastante avanzadas". "En Alta Velocidad somos la joya de la corona y eso nos ha ayudado también a exportar conocimiento, pero sí que es verdad que hay que invertir más en líneas convencionales", asegura.
Por el momento, el centro de ingeniería de Siemens Mobility en València se ubica en un coworking en el centro de la ciudad. Se trata de una primera localización provisional para arrancar el proyecto. Había mucho interés por no demorar la puesta en marcha de esta oficina y la compañía decidió empezar en una ubicación temporal, mientras buscan una sede. Su aspiración es encontrar un gran espacio por la zona de la Marina y nutrirse de todo su ecosistema.
"Todavía no nos hemos puesto en modo búsqueda. Lo primero que queríamos era arrancar. El siguiente movimiento era ver por dónde va el ecosistema innovador y ya hemos detectado que la tendencia es la Marina. No nos limita, pero sí que estando cerca de la innovación las cosas fluyen y nosotros somos una compañía que no nos aislamos, sino que estamos abiertos a colaborar. Lo que queremos es que la innovación fluya y el talento se desarrolle", remarca Romojaro.
El grupo Siemens, que está presente en España desde hace más de 125 años, cuenta con instalaciones de la filial Mobility en Tres Cantos, donde además de las nuevas instalaciones tenía un Centro de Competencia de Señalización Ferroviaria, y en Cornellà (Barcelona), en los que emplea a cerca de 1.500 personas.
La empresa anunció a principios de 2021 la creación de un hub de ingeniería para su negocio de material rodante en Tres Cantos (Madrid), que pasaría a formar parte de la red global de ingeniería de la empresa, con instalaciones en Alemania, Austria, República Checa y Serbia, entre otros países. La previsión era crear 60 puestos de trabajo de alta cualificación.