VALÈNCIA (VP)/EP). Los títulos de Siemens Gamesa se dispararon ayer más del 8% en bolsa después de que Siemens haya considerado la posibilidad de incrementar su participación en la compañía de aerogeneradores a través de la compra del 8% que actualmente controla Iberdrola. En concreto, las acciones de Siemens Gamesa cerraron la jornada con una revalorización del 8,48%, hasta alcanzar los 14 euros por acción, el precio más alto para sus acciones en los últimos dos meses.
Según informaron a Bloomberg fuentes cercanas a la operación, el grupo industrial alemán está considerando adquirir ese 8% de Iberdrola, valorado a precio de mercado en 720 millones de euros, aunque la previsión es que Siemens abone una prima sobre este precio, lo que le permitiría elevar hasta el 67% su participación en Siemens Gamesa. Estas mismas fuentes indicaron, a su vez, que Siemens no descarta realizar más adelante una oferta para la adquisición de las acciones restantes en Siemens Gamesa, aunque resaltaron que todavía no se ha tomado una decisión al respecto.
Cuando ambas compañías se fusionaron en 2016, y debido a que Siemens superó el umbral del 30% necesario para lanzar una OPA por el 100% del capital, la multinacional alemana solicitó su exención aludiendo a que se trataba de dos compañías industriales del mismo sector, algo que la CNMV aprobó. En el marco de esta operación, Iberdrola y Siemens suscribieron un pacto estableciendo que, en caso de incumplimiento por parte de la alemana de alguna de las obligaciones y compromisos del acuerdo, la energética española tendría derecho a vender su participación a la germana.
Aun así, Iberdrola, que ha venido mostrando en varias ocasiones su oposición a la gestión imprimida por Siemens del grupo resultante tras la fusión, pidió a la CNMV en 2018 que revisara la exención de lanzar la OPA. No obstante, el regulador respondió que "no apreciaba" ningún motivo para revisar esta exención.
En este contexto, Siemens buscaría ahora con esta operación zanjar las disputas abiertas con Iberdrola, justo en una semana en la que ambas compañías volverán a verse las caras por sus desavenencias, en esta ocasión en los tribunales. Este nuevo frente en las diferencias entre ambos tiene su origen en el impacto que Iberdrola estima que podría tener en Siemens Gamesa la decisión de la multinacional alemana de traspasar todo su negocio energético, incluida su participación de control en el fabricante de aerogeneradores, a una nueva sociedad que cotizará en Bolsa a partir de septiembre de 2020.
