Sindicatos de Ford condicionan su apoyo al ERTE en Almussafes a un plan de control del empleo 

VALÈNCIA. Siguen las negociaciones para un nuevo expediente de regulación de empleo temporal (ERTE) de cuatro días para toda la plantilla en la planta de Ford en Almussafes. La factoría se encuentra inmersa en un proceso de reajustes para adaptar su producción a la caída de la demanda, un escenario que supondrá una bajada de entre 100 y 150 vehículos diarios desde septiembre. Este viernes la dirección de Ford España y el comité de empresa de la compañía se volvieron a reunir para abordar algunos puntos de la negociación relativos a los complementos salariales de los trabajadores.

El encuentro se cerró con un preacuerdo para que tanto los empleados de la planta de vehículos como los de la de montaje de motores, conserven el 80% de su salario bruto y el 100% de las pagas, vacaciones y antigüedad de los trabajadores. Además, la dirección de la compañía estadounidense se comprometió a atender primero las voluntariedades para abandonar el turno de noche. 

No obstante, la principal preocupación en la planta es la incertidumbre futura y qué pasará más allá del ERTE, previsto para los días 1 y 2 de agosto y 19 y 20 de agosto. A falta de concretar los últimos flecos en la negociación, el comité de empresa exige a la dirección buscar un plan a largo plazo para planificar el porvenir de la factoría. 

A este respecto, Carlos Faubel, portavoz de UGT, sindicato mayoritario en Ford Almussafes, incidió en la necesidad de realizar un seguimiento del empleo a través de la comisión del Observatorio para el Empleo una vez pase el lanzamiento del nuevo Kuga, el modelo del que depende la mitad de la producción total de la planta. 

"No queremos cerrar un acuerdo que valga tan solo de aquí a diciembre. ¿Y luego qué pasa cuando se lance el coche (nuevo Kuga)? Tenemos que llevar un control sindical del empleo y que no nos pille por sorpresa", subrayó Faubel. Por ello, exigió a la dirección de Ford un acuerdo que plasme su compromiso de celebrar reuniones trimestrales para ver la evolución del empleo en la planta y planificar los siguientes pasos, una exigencia que condicionará su apoyo a la propuesta de ERTE en la reunión del próximo lunes.

Plan de reestructuración

La reducción de la producción en Almussafes se debe a la caída de la demanda de vehículos y supondrá dejar la cifra de vehículos fabricados en 360.000 frente a los 380.000 inicialmente previstos. Asimismo, obligará a recolocar a unos 300 trabajadores del turno de noche en turnos de día y concentrar esfuerzos en el lanzamiento del nuevo Kuga. 

Además, se está a la espero de conocer los planes de Ford en Almussafes, donde ya ha avanzado un recorte en los turnos, en el marco de su plan de reestructuración iniciado en Europa con el objetivo de alcanzar un negocio rentable y sostenible. 

En España, la firma del óvalo emplea a unas 8.100 personas repartidas en tres turnos y creará unas instalaciones de montaje de baterías para vehículos electrificados, que se espera que estén operativas en septiembre de 2020.