CASTELLÓ. La compañía Saerco perderá, previsiblemente, la gestión de los controladores del aeropuerto de Castellón. Una de sus competidoras, la firma Skyway, ha sido propuesta como adjudicataria del nuevo contrato para control del tránsito aéreo en la torre de control al obtener la mejor puntuación. Así, a falta de la adjudicación definitiva, será con toda seguridad la nueva encargada de este servicio en relevo de Saerco, que lo prestaba desde 2012.
La empresa pública gestora del recinto aeroportuario de Castellón, Aerocas, lanzó la licitación para adjudicar el nuevo contrato, puesto que el último vencía en diciembre. Un concurso público al que se han presentado tres compañías: la actual gestora Saerco, Skyway y la UTE Comsa-DFS. Y tras la evaluación de sendas ofertas por parte de la mesa de contratación, la decisión definitiva ha estado reñida entre las dos primeras propuestas, que han obtenido puntuaciones similares, pero finalmente la de Skyway ha acabado resultando vencedora.
Así consta en la documentación relativa a la mesa de contratación de Aerocas, reunida el pasado 3 de noviembre para abrir los sobres de las ofertas recibidas en el concurso público. En su resolución, otorga la mayor puntuación -99,348 puntos de 100- a la oferta de Skyway, que ha aventajado a su principal competidora sobre todo en la baja económica para las horas adicionales de servicio. Por detrás en el total ha quedado Saerco, con 93,563 puntos, y muy lejos la UTE COmsa-DFS, con 74,679 puntos.
Así pues, y en base a estas valoraciones, la mesa de contratación ha propuesto la adjudicación del contrato a la mejor oferta, que ahora deberá confirmar Aerocas. Por el momento se desconoce el montante total de la adjudicación, pero el contrato salió a licitación por valor de más de 7,1 millones de euros (IVA incluido) para amarrar la gestión de la torre de control durante un lustro a partir de la autorización del Ministerio de Transportes.
De confirmarse finalmente la adjudicación a Skyway -anterior FerroNats-, que está controlada por Serveo -Portobello y Ferrovial-, será la séptima base en la que gestione el servicio de los controladores aéreos en al torre de control y lo hará en los tres aeropuertos de la Comunitat Valenciana. Actualmente, ya lo hace en Valencia y Alicante-Elche, además de Ibiza, Murcia, Sabadell y Lleida-Alguaire.
En España, son tres los operadores de las torres de control de los aeródromos: la entidad pública Enaire, presente en una veintena de aeropuertos como Barajas, El Prat, Bilbao, Gran Canaria o Tenerife; la compañía Saerco -además de hasta ahora Castellón, gestiona las torres de otros trece como Fuerteventura, La Palma o Sevilla-; y la firma Skyway Además del Ejército del Aire, encargado de otros seis aeropuertos como Zaragoza o Albacete.
Según explicaron en su momento fuentes del aeropuerto de Castellón, las prestaciones del nuevo contrato "son similares a los del actual", puesto que es "un contrato flexible que permite adaptarse a diferentes escenarios de actividad". En su Plan de Crecimiento, el aeropuerto castellonense prevé más de 270.000 pasajeros este año y más de 9.300 operaciones. Unas previsiones que irían ascendiendo año tras año hasta casi triplicar el número de usuarios en cuatro ejercicios, con más de 610.000 personas en 2027 y más de 16.000 operaciones. Cifras que, más que un objetivo, son proyecciones realizadas a partir de estudios internos.
La empresa adjudicataria del contrato de control del tráfico aéreo tendrá que reportar mensualmente a principios de cada mes los detalles de las operaciones realizadas, tanto en número de movimientos como "otros indicadores sensibles", así como información de incidencias que afecten a la capacidad operativa de la base, según reflejaban los pliegos de condiciones de la licitación. También se encargará de la coordinación con los servicios del aeropuerto sobre la secuencia de entrada de las aeronaves, suministro de combustible, pruebas de motor, vehículos de transporte de tripulaciones, etcétera.
Entre las obligaciones de la firma está también la notificación de desperfectos, averías, derrame de combustible, maletas y otros objetos en el área de maniobras. Y deberá informar de la existencia de vehículos y/o personal en el área de maniobras sin coordinación previa, supervisar los vehículos de extinción de incendios en su rodaje diario por las pistas, comunicar accidentes e incidentes que se produzcan en tierra y en vuelo, así como de interferencias ilícitas e incluso avisar de emergencias médicas en tierra y en vuelo.