Profesores de la Escuela de Hostelería Fundación Cruzcampo de Valencia han creado una copa de cítricos inspirada en la frescura, la fuerza y el carácter de smart. Ahora el reto lo tienen los alumnos: deben crear en menos de un mes una tapa que reúna de la manera más sabrosa todo el espíritu smart
VALENCIA. smart center Valencia continúa con el reto del proyecto ‘Creativity, tapas & song’. En esta ocasión, una veintena de alumnos del Curso de Técnico en Establecimientos de Restauración de la Escuela de Hostelería Fundación Cruzcampo de Valencia han acudido al concesionario valenciano para conocer de cerca smart. Tocar, probar, sentir un smart e inspirarse en el pequeño gran coche para elaborar una tapa única y exclusiva que refleje la esencia smart.
Desde smart center Valencia se ha animado a los estudiantes a asumir el reto como su primer encargo, su primer contacto con el mundo empresarial, y a sentir el coche para inspirarse y elaborar una tapa diferente, atrevida. Se ha alentando a los futuros chefs a “dar rienda suelta” a la imaginación y a elaborar una tapa basada en smart, “un concepto diferente de coche, creativo, muy versátil gracias a las posibilidades de colores y acabados que permite y muy adaptable al cliente, ya que se puede personalizar al máximo”.
La tapa vencedora será la que más se acerque al mundo smart y refleje su filosofía innovadora. Será desvelada, tras la deliberación de un jurado formado por profesores de la escuela, una personalidad del mundo culinario y el equipo que se designe de smart Valencia en una gala especial que tendrá lugar en diciembre, y recibirá un premio en metálico, al igual que el segundo y el tercer clasificados. En la misma gala se entregarán los premios al mejor diseño y a la mejor composición musical basados en smart presentados por los alumnos de la Escola d’Art i Superior de Disseny de Valencia (EASD) y del Conservatorio Superior de Música ‘Joaquín Rodrigo’, que participan también en la iniciativa ‘Creativity, tapas & song’.
Para ayudar a los alumnos de Restauración a elaborar su tapa, para la que tendrán un mes de tiempo, profesores de la Escuela han querido conducir un smart y elaborar un postre según las sensaciones experimentadas. ¿El resultado? Una copa de cítricos realizada con una crema de hierbabuena, que “refleja la frescura propia de smart”; sorbete de clementina, fruta de temporada y característica de Valencia que simboliza un coche “actual y moderno”, y una emulsión de lima limón reflejo del “carácter, la personalidad y la fuerza” de smart que, con la textura etérea que le proporciona el sifón, “plasma la suavidad, delicadeza y
elegancia que muestra el coche cuando se conduce”. “Como el coche, un postre pequeño pero con cuerpo y carácter”.
En el acto han estado presentes los profesores Jaume Galán, Carmelo Moreno y Esther González, que se han mostrado muy ilusionados con el proyecto y que han animado a sus alumnos a jugar con el abanico de sabores, colores y texturas que tiene la cocina, y que conjugan a la perfección con las posibilidades de colores, motores y acabados diferentes que tiene smart.
La Escuela de Hostelería Fundación Cruzcampo se encuentra en el vanguardista edificio del Veles e Vents de la Marina Real, donde HEINEKEN España y el Grupo La Sucursal se han unido en pro de la gastronomía, la cultura y la formación. Desde la escuela, donde juega gran importancia la creatividad y la innovación, se apuesta por el talento de los jóvenes y la profesionalización del sector de la hostelería.
‘Creativity, tapas & song’ es una iniciativa de smart Valencia con motivo de la elección de nuestra ciudad como smart city y que tiene por objetivo poner de relieve el potencial cultural de nuestra tierra y la creatividad de nuestros estudiantes. En el proyecto participan alumnos de la Escuela d’Art i Superior de Disseny de Valencia, de la Escuela de Hostelería-Fundación Cruzcampo y del Conservatorio Superior de Música ‘Joaquín Rodrigo’ de Valencia, que tienen como reto crear un diseño, una tapa y una composición musical que refleje la filosofía y el espíritu smart.