VALÈNCIA. El anuncio por parte de un grupo de 21 integrantes de Gent de Compromís de su salto al Bloc ha generado cierto revuelo en la coalición que lidera Mónica Oltra. Aunque el número total no es cuantioso, ha llamado la atención el paso dado por cargos institucionales que habían sido elegidos dentro de la cuota de afiliados que no pertenecen a ninguno de los tres partidos que conforman Compromís (Bloc, Iniciativa y VerdsEquo).
Es el caso de la diputada autonómica Mariam Campello o de la concejal en el Ayuntamiento de València Isabel Lozano, que venían siendo caras visibles dentro de Gent de Compromís pero que, ahora, han decidido integrarse en la formación nacionalista, al igual que varios concejales de distintos municipios.
Así, este grupo explicó en un comunicado enviado este miércoles su decisión desde un plano ideológico y organizativo: "No podemos seguir militando en un limbo democrático donde no se reconocen nuestros derechos". En este sentido, justificaban su elección por el Bloc al haber mostrado "una actitud más cercana" y "una mayor voluntad de resolver la situación" del colectivo. "Siempre hemos sentido más empatía por su parte y una voluntad más clara de buscar nuestro encaje en la coalición, aunque los frutos al final hayan sido, hasta el momento inexistentes", argumentaron.
Una maniobra que, en otros ámbitos de la coalición, explican de una manera más mundana y estratégica. Es decir, en el caso de los cargos institucionales más destacados de Gent de Compromís, el salto al Bloc otorga más posibilidades a los protagonistas de conseguir repetir en el cargo en las próximas elecciones autonómicas y locales. Cabe recordar que la formación nacionalista es la que cuenta con mayor afiliación (cerca de 3.500 militantes) de Compromís, por lo que en el caso de unas primarias abiertas el apoyo del Bloc es un músculo importante para salir elegido. En este sentido, un trasvase de estas características deja en una posición de debilidad a Gent de Compromís, que se había convertido en un problema en cierta medida ruidoso dentro de la coalición.
Por otro lado, otras fuentes consultadas señalaron que el paso se produce con una antelación considerable a las elecciones. Sobre esto, algunos consideran que se ha elegido este momento porque, de no haber primarias abiertas conjuntas en Compromís, las listas se dirimirían con procesos dentro de los propios partidos y para participar y ser elegidos en los mismos se exige al menos seis meses de militancia.
Más allá de estas posiciones críticas hacia lo acontecido, este jueves se produjeron varias reacciones a este paso de 21 militantes al Bloc. Así, desde Gent de Compromís se limitaron a "lamentar la marcha" de miembros de su colectivo a la formación nacionalista y a "reafirmarse como garantes del espíritu de Compromís". Un comunicado en el que, no obstante, aseguraban "entender las razones expresadas" por el grupo que se sumaba al Bloc y agradecían "su trabajo y esfuerzo". "Su transparencia y lealtad está fuera de toda duda", señalaron, para afirmar que este colectivo seguirá trabajando para incrementar la participación en el proyecto de Gent de Compromís para "conseguir el objetivo de la plena integración de todos y todas los que formamos parte de Compromís".
Otra de las reacciones, en este caso más incisiva, fue la del diputado de Gent de Compromís Josep Nadal. El parlamentario manifestó en Facebook su "respeto" por la decisión y aseguró compartir "totalmente las razones" de su decisión, pero descartó imitar ese movimiento a corto plazo.
En este sentido, el diputado lamentó que en la coalición se "impusiera el modelo UTE incapaz de hacer ninguna propuesta de futuro que fuera más allá de la brega institucional". "Compromís ahora mismo no sabe qué quiere ser de mayor", sentenció, para puntualizar que pese a la "simpatía creciente" en la sociedad valenciana "el número de gente que quiere entrar a Compromís apenas ha crecido desde 2015".
Así, aunque afirmó que, a su juicio, el Bloc es el único de los tres partidos que componen la coalición que puede "dibujar de manera democrática y participativa el futuro", lamentó que no lo esté haciendo. "De cara a la sociedad valenciana, parece que se congeló en el año 2007 y solo vale para que te afilies a Compromís", explicó en su reflexión, para considerar que la formación nacionalista debe ser la encargada de impulsar una "propuesta de futuro a la sociedad valenciana que cuente con la participación de muchísima gente". "El día que se decidan a renacer para ser más fuertes yo estaré ahí como lo he estado desde los 16 años", concluyó.