VALÈNCIA. La industria valencia reclama atención tras los grandes destrozos que dejó a su paso la descomunal Dana, que arrasó la provincia de valencia el pasado 29 de octubre. Más de un mes después de la tragedia, muchas compañías siguen peleando todavía contra los estragos del temporal en sus negocios. Todavía quedan fuerzas para seguir y salir adelante, pero poco a poco se apagan las fuerzas. Por ello, piden a la Administración que acelere las ayudas económicas, pero también que ponga más medios para vencer la batalla al fango y la acumulación de enseres para poder retomar su actividad. De lo contrario, muchos bajarán la persiana de forma definitiva.
"Nos sentimos olvidados y dejados de la mano de Dios. Hace falta que limpien y rasquen todo el barro que aún queda. También, tenemos problemas de seguridad con robos y saqueos porque muchas puertas están destrozadas y los herreros no dan abasto. Algunos hemos tenido que pedir ayuda a profesionales de otras provincias", señala Verónica Bosch, presidenta de la Asociación de Polígonos Industriales de Paiporta (APIP). "Entiendo que la prioridad han sido las personas y los pueblos, pero pedimos que no se olviden de nosotros porque de nuestra actividad dependen muchas familias", remarca. Solo su asociación representa a 210 empresas ubicadas en los tres parques empresariales del municipio -Alqueria la Mina, La Estación y La Pascualeta-.
Lo cierto es que en este momento, dada la gravedad de la situación en gran parte del sur de la provincia, hay varias brigadas desplegadas sobre el terreno ayudando en las labores de limpieza y desescombro. Solo el Ivace+i, dependiente de la Conselleria de Industria, tiene más de cien operarios y 94 vehículos trabajando en 25 parques industriales, pero desde Paiporta, considerada como la zona cero de la catástrofe, reclaman más recursos.
"No solo tenemos acumulación de enseres y lodo, sino que toda la porquería se está depositando en parcelas vacías generando un lodazal", lamenta. "Esto sigue pareciendo una zona de guerra y no vemos ya tanta maquinaria ayudando", lamenta. En este sentido, detalla que el polvo y la suciedad también está complicado la reconstrucción porque el mal estado de la calzada provoca pinchazos en ruedas de vehículos, además, el alcantarillad está obstruido.
Pero no solo eso, sino que explica que muchas zonas están sin suministros como agua y luz, lo que lastra su recuperación y puesta en funcionamiento. "Muchas fábricas están sin luz porque los cuadros eléctricos han quedado inoperativos. Hay muchos cortes de luz. Nos sentimos muy solos. Entendemos que al principio los recursos fueran a los pueblos. Lo comprendo, pero los polígono somos también parte del pueblo", subraya Bosch.
El SOS de la industria también pasa la reclamación de que se agilicen los procesos para la concesión de ayudas económicas del Gobierno y la Generalitat Valenciana, así como los anticipos del Consorcio de Compensación de Seguros porque ese balón de oxígeno no llega. "Muchas compañías ya han recibido la visita de los peritos, han presentado toda la documentación, pero no han recibido nada", critica Bosch.
"La mayoría de las firmas afectadas son pymes que han perdidos maquinaria, que es carísima, y mucha materia prima y si no perciben los adelantos no pueden empezar y mucha gente cerrará", advierte. Por eso lanza un grito de auxilio para apretar y que las Administraciones se pongan las pilas. "Hay muchas ganas de empezar, pero necesitamos que adelanten ya indemnizaciones para reabrir".
Con todo, exige que los polígonos y áreas empresariales no se queden "atrás" en la recuperación porque "detrás de cada pymes hay personas y familias", enfatiza. Pero también porque son parte de la riqueza y la generación de economía y riqueza de muchos municipios valencianos. Solo en los tres polígonos de Paiporta trabajan de forma directa cerca de 2.000 personas. "Necesitamos empezar a facturas. Es una cuestión de supervivencia", remarca.