MADRID (EFE). La contratación se recuperó en 2021 con 19,3 millones de acuerdos laborales sellados, un 21 % más que en 2020, de los que la gran mayoría, 17,2 millones, fueron temporales, un alza del 19 %; mientras que los indefinidos, 2,1 millones, superaron en un 37 % las cifras del año más duro de la pandemia. Según la estadística del Servicio Público de Empleo (SEPE), la cifra global de contratación de 2021 no ha alcanzado aún los niveles récord prepandemia: 2019 cerró con 22,5 millones de contratos firmados y 2018 con 22,2 millones, de los que la gran mayoría, alrededor del 90 %, fueron temporales.
En 2020, el duro golpe de la pandemia en la economía desplomó esas cifras hasta los 15,9 millones, mínimo desde 2013, manteniendo ese esquema de una gran mayoría de temporales, 14,3 millones, y solo alrededor del 9,5 %, 1,5 millones, indefinidos. La cifra total de contratos firmados cada año se completa con otras modalidades como los de relevo, jubilación parcial, prácticas o investigador.
Se trata de un esquema, nueve de cada diez contratos firmados cada mes son temporales, que se repite cada ejercicio desde hace años, reflejo de la excesiva temporalidad y rotación del mercado laboral español y ante la que el Gobierno ha pactado con patronal y sindicatos algunos cambios en el marco de la reforma laboral. Así, a partir de marzo de este año las empresas deberán adaptarse a un nuevo esquema de contratación que presupone como ordinario el indefinido y reduce modalidades y causas en las que se puede acudir a los temporales así como su duración acabando con el de obra y servicio, la modalidad más usada.
De vuelta a las cifras de contratos de 2021, el año pasado se firmaron 6,99 millones de acuerdos temporales en esa modalidad de obra y servicio y 8,68 millones por circunstancias de la producción, a los que se sumaron 1,34 millones de interinidad. Por duración, el 23 % de todos los acuerdos de 2021 no llegaron a la semana, un punto en el que la reforma también ha introducido nuevas penalizaciones para desincentivar el uso inadecuado de estos contratos de muy corta duración. Por sectores, los servicios, como suele ser habitual, coparon el 66 % de todos los acuerdos sellados con 12,9 millones sobre ese total de 19,3 millones y con un alza del 29 % sobre el año pasado, donde la pandemia golpeó con especial dureza a sectores como hostelería, turismo o restauración.
En cuanto a los 2,1 millones de indefinidos, 1,25 millones fueron iniciales y 877.865 convertidos desde otras modalidades, esta última cifra, la mayor de la serie. En esta contratación las cifras sí alcanzan ya niveles prepandemia, ya que en 2019 se firmaron también 2,1 millones de estos acuerdos, mientras que la cifra de contratos temporales sigue unos 3 millones por debajo.
Esa mejor recuperación de los indefinidos ha hecho que el peso de estos contratos suba ligeramente sobre el total hasta rozar el 11 %, un porcentaje que debería seguir al alza en los próximos años con la entrada en vigor de la reforma laboral. Para analizarlo, el Gobierno se ha comprometido en el real decreto que ahora deben convalidar las Cortes a evaluar los resultados de las medidas pactadas en 2025, un "examen" que deberá repetirse cada dos años.