La vida te sitúa o resitúa según las circunstancias que surgen. Unos son/eran gente principal y otros no tanto, aunque creyeran lo contrario. Unos abdican, a otros los retiran o destronan e incluso algunos reviven y otros quieren revivir. Y a la hora del homenaje, balance o regreso reclaman para sí honores que a lo mejor no les corresponden.