VALÈNCIA. Desde la Dirección General de Emprendimiento se está apoyando a proyectos de emprendedores que generan una propuesta de valor positiva para el entorno, social y ambientalmente, a través de la innovación. Es lo que se conoce como emprendimiento de triple impacto, «aquel que se enmarca en la triple hélice de la sostenibilidad desde su inicio y que sin abandonar la rentabilidad económica, añade otro tipo de valor, el social y el ambiental», explica Teresa García, directora General de Emprendimiento y Cooperativismo de la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo.
Para ello han puesto en marcha el programa LLAMP CV, donde se acompañan los proyectos emprendedores de triple impacto desde la fase ideación, con Llamp Digital, el acompañamiento e incubación en Llamp AMES, y finalmente su aceleración para facilitar su consolidación como actividad empresarial. «Llamp 3I es el final de la etapa del programa. Los objetivos de LLAMP 3I, son 2, por una parte democratizar el acceso a los servicios de acompañamiento para este tipo de empresas y startups, y por otra introducir la sostenibilidad en el proceso de aceleración de startups y proyectos emprendedores desde las fases más tempranas». A este programa se suman el Campus del Emprendimiento Innovador, puesto en marcha con las universidades públicas valencianas para el fomento del espíritu innovador tanto entre estudiantes como profesorado.
-¿Por qué es necesario apostar por el emprendimiento de triple impacto?
-Porque la consolidación de empresas y proyectos emprendedores de triple impacto son las que propiciarán el cambio de modelo productivo. De nada sirven disrupciones tecnológicas que causen desigualdad y precariedad en el trabajo, o que comprometan la sostenibilidad ambiental. Junto con la rentabilidad económica, hay que incorporar el balance social y ambiental de los proyectos emprendedores.
-¿Qué papel va a jugar ese emprendimiento de triple impacto para acceder a los fondos Next Generation?
-Debe de ser una vía que facilite el acceso a los mismos. El ecosistema emprendedor valenciano goza de un dinamismo que está dando sus frutos. Se está haciendo un gran esfuerzo pro trabajar con visión compartida entre agentes y la administración. Desde el ámbito público es necesario el desarrollo de elementos, acciones y programas de referencia que sirvan como elemento aglutinador, para facilitar la interacción entre personas emprendedoras y agentes del ecosistema y que enfactice en la sostenibilidad como elemento de equilibrio y generador de bienestar.
-¿En qué fase se encuentra la ejecución del Plan Estratégico de Emprendimiento 2019-2023?
-Nos encontramos en pleno proceso de desarrollo e implementación del Plan, realizando los informes de seguimiento que se darán cuenta en el Consejo Valenciano del Emprendimiento, cuyas cifras son esperanzadoras después de un momento complicado como el de la pandemia.
Dentro de los análisis de seguimiento y del diálogo con los diferentes agentes del ecosistema, hemos detectado que tenemos que avanzar en sistemas de gobernanza, que la transferencia tecnológica en etapas avanzadas del proceso de innovación debe potenciar las capacidades emprendedoras, para poder cristalizar empresarialmente, y que para garantizar la igualdad de acceso en el desarrollo del emprendimiento de forma inclusiva, hay que acompañar a la persona emprendedora y apoyarla.
En Les Corts se ha debatido sobre la renta emprendedora y me parece una idea muy interesante, que existe en Francia y UK, y que, ligada a la consolidación de los proyectos emprendedores y sus objetivos, supone una consolidación social que debemos atender, sobre todo en las personas jóvenes.
- Según un estudio de la la UMH, la actividad emprendedora de la Comunitat resiste a la pandemia y aumenta hasta alcanzar al 5,1% de la población, ¿a qué cree que se debe?
-La pandemia ha supuesto un reto social y humano de gran envergadura, que ha afectado a la actividad económica, y que ha hecho que nos cuestionemos también cómo esa actividad se viene desarrollando. El campo del emprendimiento, de empezar a desarrollar las ideas de forma distinta, forma parte de ese cuestionamiento en sí. Han surgido iniciativas emprendedoras en pandemia muy interesantes, aunque se ha puesto de manifiesto que la resiliencia es una característica básica en el emprendimiento.
El mismo informe de la UHM, continúa arrojando indicadores históricos que tenemos que superar como el del miedo al fracaso, que también forma parte del proceso de emprender y que tenemos que verbalizar y naturalizar. Emprender no es fácil y se necesitan unas determinadas habilidades, que precisamente si sabemos despenalizar el fracaso se pueden potenciar.
La educación es clave para trabajar desde esta otra perspectiva y tenemos que potenciar las habilidades emprendedoras en la escuela y el acompañamiento en la educación secundaria y la FP.
-¿Cuáles son los puntos fuertes del ecosistema emprendedor valenciano? ¿En qué debe mejorar?
-Su dinamismo, su capacidad de diálogo y de interacción, y su creatividad. Y este ecosistema es clave para la consolidación de la actividad económica. El número de cooperativas en junio de 2021, igualaba al total de 2020, según las estadísticas del Ministerio de Trabajo. El número de empresas de nueva creación en el tercer trimestre, superaba en un 18% el del mismo trimestre de 2019, según datos del Registro Mercantil.
Son indicadores esperanzadores en cuanto a la recuperación. No obstante, debemos mejorar nuestra gobernanza y coordinación, muchas veces la hiperactividad que nos caracteriza, nos lleva a solaparnos en algunos campos y a dejar desatendidos otros.
-¿Qué aportan eventos como los workshops que ha organizado Dirección General de Emprendimiento y Cooperativismo en colaboración con Ediciones Plaza?
-Estos workshops forman parte del proceso de acompañamiento del que hablábamos, suponen una interacción real con los medios de comunicación en su “hábitat”, las startups pueden tejer sinergias con otras personas emprendedoras y con diferentes proyectos, así como perfeccionar su modo de comunicarse. Aportan gran calidad a los programas de la Dirección General y son una oportunidad para los proyectos de los programas más avanzados de LLAMP, como son el Programa LLAMP 3I y el Campus del Emprendimiento Innovador.