VALÈNCIA (EP/VP). El lenguaje teatral directo y la música "oscura" de Benjamin Britten regresan este mes de junio al Palau de Les Arts de València con la ópera 'The turn of the screw' (La vuelta de tuerca), que aborda los abusos sexuales y la pérdida de la inocencia en la infancia con una trama de terror psicológico ambientada en la Inglaterra postvictoriana. Christopher Franklin es el encargado de tutelar una partitura "de gran dificultad e intensidad" que, junto a la labor del intendente y director artístico del coliseo, Davide Livermore, logra una "unión perfecta" entre música y escena.
Así lo han explicado ambos este lunes en la rueda de prensa de presentación de la última nueva producción del Palau de Les Arts, una ópera basada en el libro homónimo del escritor inglés Henry James, en el que una institutriz entra a trabajar en una casa para cuidar a dos niños, Miles y Flora, mientras son asediados por fantasmas.
"En la obra no se sabe quién está vivo o muerto", ha explicado Livermore, quien ha destacado la capacidad y la "fuerza" de Britten para recordar al espectador que "el teatro es una espejo de nosotros" mismos. "Se habla de violencia y de abusos, del fin de la inocencia; Britten tiene una sensibilidad extraordinaria para elegir argumentos contemporáneos", ha subrayado.
En este sentido, se ha referido al momento actual en que los más pequeños están "constringidos" por la televisión, internet o los teléfonos móviles y se ven abocados a "violar una parte infantil" de sí mismos. A su juicio, "se ha roto un tiempo de inocencia" y la ópera del compositor inglés muestra, con "una historia absolutamente extraordinaria", el "daño" que la propia sociedad puede hacer a los niños. Asimismo, ha puesto de manifiesto que 'La vuelta de tuerca' se refiere "a la imposibilidad de salir de un laberinto de dolor".
La ópera, que se representará en el Teatre Martín i Soler los días 2, 4, 6 (función didáctica) y 10 de junio, cuenta con dos de los miembros del coro del Trinity School, Jeremie de Rijk y William Hardy, y con artistas de la octava promoción del Centro de Perfeccionamiento Plácido Domingo, quienes ofrecen una "relación profunda entre armonía y poesía". La obra podrá verse por un precio único de 25 euros, lo que según Livermore es "perfecto" para acercar la ópera a quienes no la conozcan todavía.
El director musical de 'The turn of the screw', Christopher Franklin, que ya dirigió en Les Arts 'Café Kafka' y 'Juana de Arco en la hoguera', vuelve ahora al coliseo con Britten, referente de la ópera lírica inglesa en Italia, ha valorado.
"La idea de Britten era llevar óperas de pequeño formato (el foso del Teatre Martín i Soler acogerá a 13 músicos) para llevarlas por pueblos de la campiña inglesa", ha recordado Franklin, que volverá en febrero de 2018 para dirigir una obra de mayor formato del mismo compositor: 'Peter Grimes'.
Ha destacado además la complejidad de su música, que supone un "gran desafío" junto a la coordinación del trabajo de escena, del que se ha mostrado muy satisfecho en Les Arts. "Es muy gratificante, hay una unión perfecta entre música y trabajo de escena", ha remarcado.
Los más jóvenes sobre el escenario, Jeremie de Rijk y William Hardy, también presentes en la rueda de prensa, han puesto en valor la "gran experiencia" que supone para ellos trabajar en España, en un ambiente "más amigable". El suyo, han explicado, es un papel "muy especial y muy difícil" a la vez que "interesante", sobre todo, según Hardy, por la música de Britten, que ha calificado de "oscura".
Livermore ha reconocido la profesionalidad de ambos, quienes "están creando identidad" cuando cantan, un logro que ha contrapuesto a las imitaciones de artistas que los niños hacen, por ejemplo, en los programas de televisión.