El consistorio también someterá a todos sus empleados públicos a las pruebas del coronavirus
VALÈNCIA. Torrent ha presentado hoy su Plan de Acción Municipal 2020, un documento que recoge más de noventa medidas destinadas a paliar la crisis del coronavirus en la ciudad. Las propuestas han sido consensuadas por todas las fuerzas políticas representadas en el Ayuntamiento, en lo que el alcalde Jesús Ros ha definido como un “ejercicio de responsabilidad”.
Uno de los principales ejes de acción de este plan es el apoyo al comercio local, sector que tras el estado de alarma ha acusado graves pérdidas económicas. Para reactivar su movimiento, el consistorio ha presupuestado más de un millón de euros en ayudas.
Una primera partida de 900.000 euros cubrirá los gastos generados por los locales durante el tiempo que hayan permanecido cerrados o abiertos a medio gas. Concretamente, los establecimientos en alquiler podrán aspirar a 600 euros, mientras que los que estén en propiedad percibirán 350 para cubrir sus pagos ordinarios de luz, agua o teléfono, entre otros.
De este modo, el Ayuntamiento pretende aliviar la carga económica de los comercios que no han podido desarrollar su actividad con normalidad. Por el momento ya se han registrado más de novecientas peticiones, de las cuales se han aprobado 120. En las próximas dos semanas, podrían entrar en este plan de ayuda otros doscientos comercios más.
Para proceder a la transformación sanitaria de los locales e implantar todas las medidas de higiene y seguridad requeridas por el COVID19, Torrent ofrecerá abonos de hasta 200 euros para los establecimientos. Esta cuantía podrá ser destinada a diferentes necesidades exclusivamente relacionadas con el coronavirus, dependiendo de cuál sea la naturaleza del local o su actividad: compra de mamparas, mascarillas, termómetros, desinfecciones…
Finalmente, el consistorio también pondrá en marcha una tarjeta que bonificará a los consumidores el 25% de las compras que hagan en establecimientos del municipio. Con una inversión inicial de 100.000 euros, Torrent busca incentivar de este modo las transacciones en el comercio local, al tiempo que alivia la carga económica de las familias.
Todavía no se conoce si las tarjetas se repartirán ya con una determinada cuantía o si serán los interesados quienes decidan cuánto dinero meterle. Lo que sí que se espera es una inyección de más de 400.000 euros en los establecimientos torrentinos, gracias a las compras realizadas a través de este mecanismo.
El grupo de trabajo designado para hacer el seguimiento de la acción ya ha adelantado que si la primera ronda funciona correctamente, estudiará una segunda inyección de otros 100.000 euros en las tarjetas. Aunque, por supuesto, se controlará minuciosamente que sean utilizadas en el municipio y no fuera del mismo.
Otra de las medidas estrella contempladas en el Plan de Acción Municipal 2020 es la elaboración de test serológicos a todos los trabajadores públicos de Torrent, aunque por el momento todavía no se conoce la modalidad de los mismos. También en la línea de las medidas sanitarias, el consistorio se ha comprometido a repartir mascarillas para toda la ciudadanía y a adaptar los puestos de atención al público a las nuevas circunstancias.
En cuanto a las ayudas económicas, uno de los sectores favorecidos será el tradicional de las fiestas. El Ayuntamiento ya ha anunciado que se reunirá con la Junta Local y las comisiones falleras para atender a sus demandas y estudiar la manera más productiva de apoyar a los negocios que sufrieron pérdidas tras la cancelación de las Fallas 2020: floristas, artistas, pirotécnicos…
También el deporte se verá beneficiado por las ayudas. En este caso, Torrent aumentará la cesión gratuita de las instalaciones a los clubes y ofrecerá bonificaciones por actividad. En el apartado de la educación, el presupuesto para las becas escolares aumentará un 30%, y para la juventud se estudiarán ayudas a la emancipación que contemplan el pago de contratos de suministro, como por ejemplo el del enganche al agua.
En el plano de los impuestos, el Plan Municipal prevé una ampliación del plazo para pedir el fraccionamiento del IBI, una acción que por el momento ya sobrepasa las cien peticiones. Del mismo modo, se han aplazado diversos tributos locales y se han derogado las tasas para las terrazas y los mercados.
El documento que recoge todas estas medidas será revisado cada tres meses por la comisión encargada de su elaboración, que está formada por un portavoz de cada grupo político con representación. En ese tiempo, se llevará al pleno municipal un informe con el avance e implantación de las propuestas.