CASTELLÓ. La plantilla de Frost-trol ha ratificado este lunes por unanimidad el preacuerdo del Expediente de Regulación de Empleo alcanzado entre la dirección y el comité de empresa el pasado viernes. La compañía de Cabanes, referente en la fabricación y comercialización de frigoríficos, realizará los primeros despidos de los 123 trabajadores afectados a finales de diciembre o primeros de enero, mientras el resto será en diversas tandas hasta el mes de mayo.
Las condiciones definitivas del ERE han reducido de 144 a 123 la cifra inicial de ceses, repite las mismas indemnizaciones de la anterior extinción de empleo de mayo (28 días y 15 meses) e incorpora cláusulas sociales para minimizar el impacto en los empleados de más de 50 años. De este último grupo solo formarán parte del ERE 34 de los 123.
La empresa culmina el segundo ajuste laboral en ocho meses y continuará con una plantilla de 153 personas. En estas condiciones quiere implementar a partir del próximo año una nueva reorganización interna que refuerce su competitividad. Asimismo, quiere dejar atrás los problemas económicos derivados de 2021 por un fraude interno que supuso unos daños económicos de 14 millones.
Frost-trol ha anunciado la puesta en marcha en 2025 de un plan estratégico con el que pretende "consolidar una posición diferencial dentro del sector de la refrigeración comercial, impulsando su oferta de servicios, centrándose en nuevas áreas de negocio y reduciendo otras menos estratégicas y de menor rentabilidad".
Sus líneas principales pasan por "reforzar el área de servicios de refrigeración y postventa, posicionando a Frost-trol como un aliado integral para sus clientes, más allá de la fabricación de equipos"; "deslocalizar parte de la oferta productiva en segmentos altamente competitivos en costes, con el objetivo de maximizar la rentabilidad y garantizar la sostenibilidad a largo plazo", y "ampliar la oferta de soluciones para el comercio electrónico y digitalización, apoyando a los clientes en su transición hacia modelos de negocio omnicanal".
Entre otras medidas, priorizará en la fabricación y comercialización a una decena de grandes clientes, subcontratará parte de la oferta productiva que no aporta valor dentro de la cadena de suministro, y creará una firma de servicio que se enfocará en el mantenimiento.