VALENCIA. Los coches del segmento medio que ofrecen una experiencia de conducción especialmente gratificante se suelen encontrar principalmente en las marcas premium, pero, cuando llegue al mercado el nuevo Opel Insignia Grand Sport a finales de la primavera de 2017, los conductores más entusiastas deberán contemplar otras opciones.
El nuevo Insignia con caja de cambios automática de ocho velocidades estará disponible con el sistema de tracción integral con reparto vectorial del par motor de avanzada tecnología que ofrece los más altos niveles de dinamismo, comportamiento y manejabilidad del mercado.
“La nueva generación del Opel insignia establece unas nuevas referencias para los coches del segmento medio”, dice William F. Bertagni, vicepresidente de Ingeniería de Vehículos para Europa. “El reparto vectorial del par motor representa la tecnología más avanzada para transmitir la potencia a la carretera. El nuevo Insignia con sistema de tracción integral vectorial iguala a lo mejor que haya en la industria en lo que a diversión de conducción se refiere”.
La tracción integral vectorial es el mejor sistema para transmitir gran potencia a la carretera, da igual que esta esté seca, húmeda, helada o cubierta de nieve.
Pero el peso adicional y la complejidad de los sistemas convencionales de reparto vectorial del par motor evitan que cumplan los altos estándares de prestaciones y eficiencia de Opel. Por ello, el nuevo Opel Insignia utiliza un sistema de tracción integral Twister con un módulo en el eje trasero que lleva un sistema de doble embrague sin diferencial.
El sistema de tracción total del Insignia puede aplicar el par motor a una o a ambas ruedas traseras de forma independiente, permitiendo repartir vectorialmente el par en todo el rango de prestaciones del coche.
En curvas cerradas se traslada más par a la rueda exterior, induciendo el giro sobre el eje vertical (rotación) – así, el Insignia gira con mayor precisión, respondiendo de forma más espontánea a las solicitudes del conductor.
El reparto vectorial también contribuye a la seguridad al controlar la distribución del par motor según los cambios en la posición del acelerador, el ángulo de giro del volante y el estado de la carretera, amortiguando el efecto rotacional. Esta utilización inteligente de la distribución del par motor – también llamada “amortiguación rotacional” – da como resultado un comportamiento más neutro del coche, haciéndolo más estable y más preciso para el conductor.
Los conductores del nuevo Insignia podrán elegir la cantidad de “amortiguación rotacional” que mejor se ajuste a su estilo de conducción seleccionando el modo de conducción más adecuado: para un gran efecto de amortiguación podrán elegir el modo “Tour”, mientras que en el modo “Sport” tendrán menos efecto y, en consecuencia, un comportamiento más deportivo.