BILBAO (EP). Tubacex prevé incrementar un 20% su capacidad productiva y duplicar su facturación en cuatro años, hasta los 1.000 millones de euros, tras un 2018 de "recuperación", según prevé su Plan Estratégico 2016-2020, presentado este miércoles a la Junta General de Accionistas celebrada en Llodio (Álava). La compañía confía en alcanzar estas cifras mediante "la recuperación del mercado y el crecimiento orgánico", principalmente en Asia y EE.UU.
El consejero delegado de Tubacex, Jesús Esmorís, ha repasado los datos del ejercicio 2016 en un encuentro con periodistas previo a su reunión con los accionistas, en el que se logró un beneficio neto de 507.000 euros, un 94% menos que en 2015, en "el peor escenario posible" de la situación macroeconómica, con materias primas "en niveles históricamente muy bajos" y una situación del precio de petróleo que llevó a una reducción de las inversiones en el sector de la exploración y producción. Esmorís ha pronosticado que 2017 se desarrollará "en la misma línea", aunque en la segunda mitad del año se podría producir "algún crecimiento", mientras 2018 será un ejercicio "de recuperación" que llevará a "la normalidad" en 2019-2020.
Ante la actual situación, Tubacex ha acometido un "control de costes exhaustivo" y se ha empeñado en "ganar competitividad" con "una diversificación en otros sectores, "para intentar compensar la caída del petróleo" y generar caja. También ha insistido en su objetivo de convertirse en un proveedor integral para sus clientes, con "acciones importantes" para tomar posición "de una forma diferente", porque "el sector no va a volver a ser igual", según Jesús Esmorís.
Tubacex pretende "vender más proyecto" y atender a pedidos "más relevantes", de forma que, en la actualidad, cuenta con "ofertas muy importantes" que confían que "a lo largo del año vayan teniendo su éxito". "Hemos ganado proyectos muy relevantes que serán para facturación de este año, pero también para los siguientes", ha indicado.
Precisamente, este miércoles se ha conocido que el grupo Tubacex se ha hecho, en el primer semestre de 2016, con una cartera de 700 millones de euros en pedidos Premium, que suministrará en los próximos tres años, y con los que ha batido su "récord histórico en este tipo de productos". Estos pedidos corresponden principalmente a soluciones tubulares de alto valor tecnológico para los sectores de extracción de gas y petróleo (tubos para umbilicales empleados en pozos offshore y OCTG, Oil Country Tubular Goods), petroquímico y de generación de energía con tecnología supercrítica (calderas).
Destacan, por su volumen, los pedidos procedentes de la región de Oriente Medio, con especial foco en Irán, donde Tubacex va a proceder a suministrar a la compañía nacional de hidrocarburos del país (NIOC) tubos para la extracción y producción de gas. El contrato, por 500 millones de euros, se ha adjudicado a un consorcio internacional de empresas del que forma parte la compañía alavesa.
La cartera incluye encargos en Europa, principalmente en Reino Unido, Noruega y también en Rusia, con un importante pedido de OCTG para la principal petrolera rusa (Lukoil) y productos tubulares para horno de refinería fabricados con un acero Premium de alta resistencia a la temperatura. Asia, con especial protagonismo en el Mar Caspio, será otro de los destinos de su producción, ya que el grupo ha captado su mayor pedido en umbilicales para Shah Deniz, uno de los mayores yacimientos de gas en el ámbito, además de China, donde recientemente ha captado pedidos de tubo para cinco nuevas centrales térmicas, así como un importante pedido de tubos Premium para una de las principales refinerías del país.
Entre los pedidos destaca, asimismo, un "importe relevante" de soluciones de ingeniería para el usuario final, como paquetes de conexiones completas y servicios en pozos de extracción de gas, por lo que la compañía dará "un salto, no solo cuantitativo, sino también cualitativo en el acercamiento a cliente y concepción del modelo de negocio". Los productos serán fabricados principalmente en el País Vasco, en TTI y Aceralava, y Austria (SBER) e Italia (IBF).
Para el consejero delegado de Tubacex, "disponer actualmente de una cartera de 700 millones para los próximos tres años" sitúa a Tubacex "en una posición muy ventajosa", ya que cumple sus previsiones en "un segmento que sigue siendo un eje estratégico clave". Además, ha apuntado que el "impulso" de ese tipo de productos de mayor valor añadido se produce en paralelo al despliegue de Tubacex Service Solutions (TSS), con centros de stock y servicio en España, Francia, Austria, Houston, Brasil, Dubai, Irán e India, "una red orientada a mejorar el servicio a los grandes clientes del sector de la distribución".
El CEO de Tubacex ha explicado que el peso del negocio oil&gas, que antes suponía dos tercios de las ventas, ha pasado a ser el 40% en 2016. Debido a que en 2017 se mantiene la situación de un mercado "flojísimo" en el área del petróleo, Esmorís ha confiado en que se reanude la actividad sectores en los que la compañía está presente. En este sentido, se ha referido al Plan estratégico de Tubacex 2017-2020, que se marca como objetivo convertir a la compañía en un "proveedor de soluciones", así como "reducir al máximo" su volatilidad mediante la diversificación y menor dependencia de las materias primas. El plan se propone, con una recuperación de mercado, alcanzar en 2020 los 1.000 millones de facturación, frente a los 500 del pasado ejercicio.
El incremento de la capacidad productiva en un 20 ó 25% se focalizará en "crecimiemo orgánico" porque "una recuperación de mercado debería llevar" a los 750 millones de facturación, y el resto se obtendrá "por crecimiento orgánico", principalmente en Asia y EE.UU., "con posibilidades de crecimiento en el futuro" Ya a lo largo de 2016, ejercicio en el que incorporó la unidad de negocio Awaji Satainless, Tubacex ya logró proyectos importantes, en Egipto en el ámbito del gas; o en Irán, país en el que ha abierto oficina y un almacén, y pretende crecer y captar proyectos en el futuro; así como en el sureste asiático y China, donde se ha optado "por pedidos muy relevantes".
De hecho, Tubacex mantiene su incremento en partidas de innovación y ya el pasado año aumentó un 50% su inversión en I+D+i con el objetivo conseguir productos y aleaciones nuevas para sus clientes, que le puedan "posicionar de una forma diferente" en próximos años. La inversión anual se cifrado en torno a los 25 millones de euros, 230 millones en los últimos seis años.
Por su parte, el presidente de Tubacex, Alvaro Videgain ha defendido ante los accionistas los resultados "muy meritorios" de la compañía en 2016, en un mercado "bastante castigado" desde 2008, debido a la caída de los precios de las materias primas y el petróleo. Además, ha admitido que Tubacex "dejó hace años de fijarse en el mercado nacional", donde el consumo de tubo inoxidable sin soldadura no llega al 5% de lo fabricado en España.
Por otra parte, ha asegurado que Tubacex cuenta con unos planes industriales "muy relevantes" para Euskadi, con mejoras en todas sus instalaciones para "ganar en competitividad" que han supuesto "inversiones importantísimas". Además, durante 2016, la plantilla en el País Vaco se ha mantenido e "incluso crecido". En total, el grupo cuenta con 2.200 trabajadores, la mitad en el Estado.
En Euskadi, la compañía tiene plantas productivas en Llodio, Amurrio y Artziniega, que se suman a la de Cantabria, en el ámbito estatal. En el extranjero, sus plantas se distribuyen en Austria, Italia, Estados Unidos, India y Tailandia. También dispone de centros de servicios en todo el mundo y presencia comercial en 38 países.