Un oasis de innovación en la sanidad pública

VALENCIA. El científico revestido de empresario es una figura cada vez más habitual en España, aunque no todo lo deseado. Eso sí, las empresas valencianas relacionadas con el sector de la salud están en pleno despunte. Entre otras operaciones, la compañía valenciana Ehumanlife anunciaba en el mes de septiembre una ronda de financiación de 1,5 millones de dólares. La también valenciana TSB vendía la participación mayoritaria de su filial de crónicos a la multinacional francesa Air Liquide Healthcare.

¿Y qué tienen en común? Las dos han pasado por el Instituto de Investigación Sanitaria La Fe, lugar donde se alberga el proyecto Biopolo La Fe, un desconocido y pionero espacio en el que innovación, emprendimiento y ciencia cobran forma. Apoyado por el Instituto de Salud Carlos III y el Ministerio de Economía y Competitividad, se trata de una iniciativa destinada a facilitar la transferencia de innovaciones en salud al sector productivo surgidas de investigadores de La Fe o de terceros, siempre que generen un valor que a medio-largo plazo pueda suponer un retorno para el hospital.

José Vicente Castell, doctor en Ciencias y en Medicina y licenciado en Farmacia, es el encargado de dirigir este instituto que hace apenas dos años decidía unir ciencia y empresa. "Se emprende a partir de la ciencia mucho más que antes, pero muy lejos de lo que sería deseable, y mucho menos que en los países con los que por PIB y bagaje científico nos podemos comparar", explica. "Si ya resulta complejo poner en marcha una empresa en nuestro país ante la evidente falta de unidad legislativa, a ello hay que añadir la dificultad con la que se encuentran los científicos, casi todos formados en el mundo académico, para dar un salto total o parcial al campo del emprendimiento".

El objetivo de este innovador instituto es acompañar iniciativas de emprendedores

Castell observa este programa como una oportunidad de trabajo más para los científicos que no encuentran acomodo en el sistema público. "Así se lo transmitimos a nuestros investigadores, apoyándoles en la puesta en marcha de este tipo de iniciativas dentro de Biopolo. Pero echo en falta políticas que faciliten esa transición o que durante un tiempo permitan la compatibilidad". A partir de ahí, los objetivos de este atípico oasis de innovación en la sanidad pública es acompañar iniciativas promovidas por emprendedores, promotores o biotechs en su diseño y validación clínica y tecnología. Pero no se conforma con eso, también busca atraer el mejor talento empresarial y de inversión hacia sus áreas prioritarias de investigación.

El IIS La Fe como inversor

¿Riesgo? Lo cierto es que se utilizan estrategias como el partenariado estratégico, una fórmula por la que se implica de forma proactiva en las empresas, realizando una dura due diligence antes de escogerlas. "Hay que ver al IIS La Fe como a un inversor capaz de aportar recursos como ideas, orientación, conocimiento clínico o equipos", asegura, aunque ocasionalmente también se realiza con inversiones monetarias. Esto lo hace a cambio de un porcentaje del valor de la venta del futuro producto o por una participación en el valor de la empresa.

(El resto del reportaje se puede leer en la revista Plaza de octubre, ya a la venta en kioscos).