CASTELLÓN. (EFE) La Fundación del Hospital Provincial y la Universitat Jaume I de Castellón han firmado un convenio de colaboración para la investigación e implantación de una aplicación móvil que monitorizará a los pacientes con dolor irruptivo oncológico con el objetivo de atenuarlo.
La "app" se encuadra en el estudio que realizan conjuntamente ambas entidades y permitirá conocer al detalle cuándo se produce el dolor, con qué intensidad y cuánto dura para tratarlo de manera más efectiva.
La directora general de la Fundación, Ana Bouché, ha destacado que con esta aplicación se dará "un paso más en busca del bienestar y calidad de vida de los pacientes que padecen cáncer en la provincia de Castellón, pues el dolor irruptivo tiene una alta prevalencia en ellos".
En la investigación participan, junto la Fundación del Hospital Provincial de Castellón, el Laboratorio de Psicología y Tecnología (Labpsitec) de la Jaume I, la Unidad del Dolor y el Servicio de Oncología Radioterápica del Consorcio Hospitalario Provincial de Castellón.
La doctora Azucena García Palacios, investigadora del Labpsitec, ha explicado que su grupo desarrolló una aplicación para el dolor crónico y ahora validarán una nueva para el dolor irruptivo, porque los pacientes oncológicos tienen episodios esporádicos de picos de dolor "y resulta complicado hacer un seguimiento de los mismos".
"La adaptación de la 'app' de control del dolor facilitará el seguimiento con el objetivo final de mejorar el tratamiento y conseguir paliar el dolor", ha puntualizado.
El dolor oncológico tiene una alta prevalencia y en la mayoría de los casos es de difícil manejo en los pacientes que padecen un cáncer, han informado desde el centro hospitalario, con una incidencia que varía según la fase de la enfermedad y el tipo de tumor.
El dolor episódico transitorio con características propias se define como dolor irruptivo oncológico, con impacto en la calidad de vida de los pacientes y elevados costes económicos.
El estudio clínico tiene como objetivo principal la monitorización de los pacientes que presentan dolor irruptivo oncológico para obtener los datos en tiempo real a través de la aplicación "Monitor Dolor Irruptivo Oncológico" y comparar esta evaluación con la realizada por el facultativo de la unidad del dolor mediante preguntas retrospectivas.
El objetivo secundario es evaluar la utilidad de las alarmas clínicas que envía la "app" para aumentar la seguridad y la eficacia de los tratamientos.
Los resultados aportarán novedades en el manejo futuro del dolor irruptivo oncológico y una mejora en la calidad de vida en los pacientes tratados.
Para la validación de la aplicación móvil se está monitorizando a pacientes con dolor irruptivo oncológico durante 30 días para obtener datos en tiempo real sobre esta patología.
También se emplea un sistema de alarmas de la aplicación móvil para valorar si su uso en un grupo de pacientes se asocia a mejores resultados clínicos.
A través de la aplicación, los pacientes responden a dos registros diarios con preguntas breves sobre el estado de ánimo, la intensidad y el tipo de dolor, su localización, la medicación que se ha tomado y sus efectos adversos o las consecuencias en la vida diaria, el sueño, el trabajo o la actividad física.
Además, la aplicación móvil permite registrar los episodios de dolor irruptivo en el momento que el paciente los padece, haciendo un seguimiento exhaustivo de los mismos, y cuenta con un sistema de alertas que llegan a los facultativos cuando varían determinados parámetros, lo que permite reajustar los tratamientos y mejorar su efectividad.
Aunque es una intervención poco invasiva, requiere la experiencia de un médico especializado para evitar complicaciones