Hoy es 9 de octubre
VALÈNCIA (EFE). El atragantamiento es la tercera causa de muerte no natural en España y solo en 2020 los atragantamientos accidentales ocasionaron 2.511 muertes, motivos por los cuales los Colegios de Enfermería de las tres provincias de la Comunitat Valenciana han impulsado una campaña de difusión de la Maniobra Heimlich.
Para ello, en locales de hostelería como bares y restaurantes, así como en centros educativos y de salud de toda la Comunitat se fijará una infografía de la campaña “La difusión de la Maniobra Heimlich como técnica sencilla para salvar vidas”, realizada por el ilustrador Pedro Jiménez y que explica cómo actuar en caso de atragantamiento.
El presidente del Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciaa (CECOVA), Juan José Tirado, ha presentado la campaña en el transcurso de la Jornada de Emergencias y Primeros Auxilios en Hostelería celebrada en el Fundación Bancaja, organizada por la Federación Empresarial de Hostelería Valencia, con la colaboración de la Conselleria de Economía Sostenible y dirigida a empresas, profesionales y alumnos de hostelería.
El presidente de Federación Empresarial de Hostelería Valencia, Manuel Espinar, ha destacado la importancia de la prevención para evitar accidentes en el ámbito de la hostelería y ha elogiado la función de las/os profesionales de Enfermería a la hora de cubrir los primeros auxilios cuando se producen atragantamientos.
Tirado ha recordado que el atragantamiento es la tercera causa de muerte no natural en España y que en el año 2020 los atragantamientos accidentales han ocasionado 2.511 muertes, 1.375 mujeres y 1.136 hombres, según un comunicado del CECOVA.
Con esta cifra, los atragantamientos y sofocación accidental "alcanzan la segunda causa de muerte accidental en España por detrás de las caídas", ha indicado para añadir que, por esta razón, "es vital conocer el protocolo a seguir si se es testigo de un atragantamiento, siendo la Maniobra de Heimlich la mejor aliada para actuar ante estas situaciones”.
Según Tirado, existe la creencia de que los más vulnerables a estos accidentes son los menores de edad, “cuando el pico de muertes se encuentra a partir de los 80 años. De hecho, las personas mayores de 80 años fallecidas por esta causa suponen el 61 % del total”.
El presidente del Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana ha explicado que la mayoría de quienes murieron atragantados tenían más de 65 años y se achaca a la disfagia, es decir, a la dificultad para tragar que aparece como síntoma de muchas enfermedades.
“Las personas que hayan sufrido un ictus, padezcan ELA o enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson tienen muchas probabilidades de desarrollar problemas de deglución y, por ello, deben seguir una dieta adaptada a sus limitaciones”, ha detallado Tirado con datos del INE.
Estos datos también confirman que las muertes por asfixia se debieron a atragantamientos por alimentos u otros objetos. Pastillas y fragmentos de dentadura son los más habituales, y en el caso de los niños, juguetes y canicas son los elementos más comunes.
Tirado ha aclarado, mientras realizaba una simulación de la Maniobra de Heimlich, que es la mejor aliada ante estas situaciones, “sin embargo, si a pesar de realizar la maniobra la víctima queda inconsciente se debe dejar en el suelo y realizar, si se conoce la técnica, reanimación cardiopulmonar básica hasta que llegue el personal sanitario”.
“Para realizar la maniobra Heimlich debemos colocarnos detrás de la víctima rodeándola con los brazos e inclinándola hacia delante. Posteriormente, cerrar el puño y colocarlo entre el ombligo y el extremo inferior del esternón del paciente con el pulgar hacia dentro. Coger el puño con la otra mano y empujar enérgicamente hacia adentro y hacia arriba”, ha concluido.