Una firma construirá un hotel de 66 habitaciones, jacuzzi y gimnasio en frente de Las Naves

VALÈNCIA. La concejalía de Actividades de València, dirigida por Lucía Beamud, concedió este lunes la licencia de obras de nueva planta para la construcción de un hotel en la calle Joan Verdeguer, en frente del edificio de la fundación municipal Las Naves, en el distrito de Poblados Marítmos.

La resolución a la que ha tenido acceso este diario, está suscrita por la concejala Isa Lozano en sustitución de Beamud, y da la licencia a la mercantil Douro Projects, radicada en Madrid, propiedad del partner de proyectos hoteleros Xpandia Projects. La firma ya promueve en la ciudad dos hoteles más.

Según la resolución, la licencia se concede para construir un hotel de seis alturas sin contar la planta baja y que tendrá 66 habitaciones en total: 6 en la planta baja, 3 en el entresuelo, 10 por planta hasta el quinto piso y 7 en la planta sexta. La nueva edificación contará también con un espacio dedicado al jacuzzi y a un gimnasio.

La resolución también da la licencia ambiental para ejercer la actividad hotelera. Ahora bien, el permiso queda condicionado, entre otras cosas, a "la no existencia de molestias por olores cuya causa sea la chimenea de la cocina". También dependerá de que el mantenimiento técnico de algunos dispositivos sea en horario diurno, y de que el jacuzzi y el gimnasio, que se ubicarán en el ático, no superen los niveles de ruido máximos permitidos.

El proyecto lleva presentado, al menos, desde octubre de 2018, cuando se solicitó el obligatorio informe de compatibilidad urbanística. Pero no fue hasta enero de 2020 cuando la sección urbanística emitió el dictamen preceptivo que permitía la ubicación del hotel. Entre noviembre y diciembre de 2020 se llevó a cabo el trámite de información pública para que vecinos e interesados pudieran hacer alegaciones.

Tras realizar las pertinentes correcciones del proyecto y tener el visto bueno también de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea para la instalación de las grúas, los promotores podrán así empezar las obras, tres años después de iniciarse los trámites.